Enlaces de accesibilidad

Cuba: regresan los apagones


Niña come alumbrada por una lámpara de baterías durante un apagón
Niña come alumbrada por una lámpara de baterías durante un apagón

Ya los apagones en La Habana duran más de 3 horas al día y en las provincias centrales y orientales, los cortes de electricidad comenzaron desde mediados de marzo.

Desde hace dos semanas se reportan apagones de hasta tres horas en diferentes distritos de La Habana. Incluso a veces el tiempo es mayor.

“El viernes 29 de abril en Altahabana (reparto al suroeste de la ciudad), la luz se fue desde las once de la noche hasta las cuatro y media de la madrugada. Por el calor que había, me pasé toda la noche echándole fresco con un abanico a mi hijo de ocho meses. Dos días antes, hubo un apagón por la tarde de tres horas”, expresa Magda, empleada de Comercio Interior.

En las provincias centrales y orientales, los cortes de electricidad comenzaron desde mediado de marzo. Según Reinaldo, vecino del barrio San Pedrito, en Santiago de Cuba, 900 kilómetros al este de La Habana, los apagones no son el único problema.

“En algunas barriadas santiagueras el agua entra cada ocho o nueve días. La gente la almacena en cubos, palanganas y estanques improvisados, lo que aumenta la posibilidad de que proliferen mosquitos trasmisores del dengue, zika y chikungunya. A eso súmale los innumerables temblores de tierra ocurridos entre los meses de diciembre y marzo, y que por temor a que el techo les cayera muchas familias dormían en los parques. Los apagones en Santiago son frecuentes. A veces de media hora, pero otros se extienden hasta cinco horas”, señala Reinaldo.

En Remedios, municipio de la provincia de Villa Clara, a 300 kilómetros de la capital, Odaisis, enfermera intensivista, relata que desde fines de abril han arreciados los apagones.

“Son de dos a tres por semana y en ocasiones de hasta cinco horas y por las noches. Con el tremendo calor, la gente se va para la calle. Numerosas personas llamaron a la empresa eléctrica, pero no les dieron respuesta”, afirma Odaisis.

Esther, ingeniera que labora en una subestación en las afueras de La Habana, asegura que no es debido a la falta de petróleo, como muchas personas piensan. "El cincuenta por ciento de la generación eléctrica del país utiliza diésel cubano. Y hay nuevas plantas que usan gas. Las dificultades se presentan por roturas imprevistas, que unido a las reparaciones en las centrales eléctricas de Matanzas y Holguín, han creado un bache de generación en horas picos”.

Un funcionario de la empresa eléctrica, que prefiere el anonimato, no cree que los actuales apagones lleguen a tener la intensidad de aquellos cortes de luz en los años duros del Período Especial.

“Nada que ver. El país está mucho mejor preparado para asumir la generación de electricidad. Se han sustituidos miles de kilómetros de cables, se han cambiado transformadores y acometidas, y las pérdidas de distribución de electricidad, que llegaron a ser de hasta un treinta por ciento, se redujeron a un cinco por ciento. También las plantas cuentan con equipos más modernos y existe un proyecto con Rusia para construir dos estaciones eléctricas y modernizar otras cuatro. El problema actual es debido a roturas, pero se deben resolver en el mes de mayo”, indica el funcionario.

Pero Noel, trabajador de CUPET, siglas por las que es conocida la empresa cubana de petróleo, tiene sus dudas. “De 105 mil barriles diarios que recibíamos de Venezuela hace dos años, ahora solo están llegando sesenta mil, y según mis jefes se espera reducir a cuarenta milo menos los barriles. En Venezuela, debido a la sequía y mal estado técnico de las centrales eléctricas, los apagones fuera de Caracas son constantes. A eso añádele la crisis económica y que la exportación de petróleo les representa el noventa y cinco por ciento de su entrada en divisas”.

Aunque el barril de petróleo ha descendido en el mercado mundial de más de cien dólares hace algunos años a poco menos de treinta dólares, Orelvis, economista, cree que el gobierno cubano no tiene los suficientes recursos para comprar combustible.

“El trueque con Venezuela era el negocio perfecto. Servicios médicos a cambio de petróleo y una parte de ese combustible se reexportaba. Ahora la generación eléctrica en el país ha crecido. Más hoteles, negocios privados que consumen más y un segmento de la población con poder adquisitivo que en sus casas tienen climatización y equipos electrodomésticos. Considero que ha habido un retroceso en la generación eléctrica, no pienso que el asunto pueda ser tan grave como en los 90, cuando el Período Especial, pero la gente debe prepararse para apagones programados los próximos meses”, acota el economista.

Raisa, tecnóloga que labora en la empresa eléctrica ve el problema desde otra perspectiva. “Cada provincia y municipio del país tiene asignado un consumo de combustible, y por diversas razones la mayoría está consumiendo mayor cantidad. Ésa, más roturas de última hora, son las causas de los nuevos apagones”, comenta.

Pero al cubano de a pie cuesta convencerlo con criterios técnicos. No hay nada que los disguste más que un apagón.

“Es un poco de cada cosa. Una jodedera conseguir la comida. Salarios que no alcanzan, transporte público deficiente y se viene informando que de continuar la sequía habrá recortes de agua en La Habana. Y para rematar, apagones de nuevo. Es demasiado. Ya son casi sesenta años con estos problemas y nunca les dan una solución definitiva”, se queja Adalberto, jubilado.

Los cortes de electricidad en Cuba son cíclicos. Por un motivo u otro siempre regresan. Es uno de los legados perniciosos de la revolución de Fidel Castro.

  • 16x9 Image

    Iván García, desde La Habana

    Nació en La Habana, el 15 de agosto de 1965. En 1995 se inicia como periodista independiente en la agencia Cuba Press. Ha sido colaborador de Encuentro en la Red, la Revista Hispano Cubana y la web de la Sociedad Interamericana de Prensa. A partir del 28 de enero de 2009 empezó a escribir en Desde La Habana, su primer blog. Desde octubre de 2009 es colaborador del periódico El Mundo/América y desde febrero de 2011 también publica en Diario de Cuba.

XS
SM
MD
LG