Desde noviembre del pasado año, una nueva ley establece que en Rusia tienen que inscribirse como “agentes extranjeros” las organizaciones con vínculos y fondos del extranjero. En cuanto el crudo invierno empezó a dar paso a la primavera, la fiscalía rusa y la policía fiscal allana las oficinas de Amnistía Internacional, Human Rights Watch, Transparencia Internacional, el Observatorio para la para la protección de los Derechos Humanos, la Fundación Konrad Adenauer o Friedrich Ebert Stiftung (FES).
El número de organizaciones bajo la pupila de la policía y fiscalía de Rusia aumenta a diario. La ola de auditorías es considerada una presión sobre la sociedad civil en Rusia, por aquellas que llevan años vinculados con estas. Pero es que no solo las filiales de organizaciones extranjeras en Rusia son las que tienen que abrir las puertas y archivos a los policías. También la policía investiga organizaciones de derechos humanos rusas como Memorial, Asistencia Pública, Agora, Veredicto Público, y otras.
Hasta el momento se han reportado que los fiscales e inspectores de hacienda revisan las registraciones y documentos de inscripción de 89 organizaciones sin fines de lucro de 24 regiones rusas. El lunes y el martes el total de comprobaciones era de 43 organizaciones no lucrativas en 16 regiones, aumentando en un 100 por ciento las oficinas bajo pesquisas en 24 horas
En la Fiscalía General de Rusia afirman que las comprobaciones de documentos ya se había planificado con anterioridad al tiempo que aseguran que están en el búsqueda de fuentes de financiamiento externo. Los fiscales amenazan con dar una “valoración jurídica” del trabajo de las estructuras regionales del Ministerio de Justicia, para determinar cuáles de ellas han combatido con celos a los “agentes extranjeros" entre las ONG.
La fiscalía ha pedido información adicional a varias organizaciones no gubernamentales como “Bellona”, dedicada al cuidado del medio ambiente o la Asociación Madres de Soldados, la Unión de Mujeres del Don y la Asociación de protección de los derechos de los votantes (Votos). También Vida sin drogas de Armavira, la Sociedad de Protección de los Consumidores, el centro de Kazan de derechos humanos y la Unión de Conservación de Aves de Saratov.
Curiosamente también preocupa a las autoridades rusas la Alliance Française de Samara, la parroquia de la Iglesia Católica Romana en Novocherkassk, y en Volgograd el centro cultural regional judío.
A través de un twitter, la embajada de EE.UU. en Rusia, manifestó que le había expresado a las autoridades rusas por los allanamientos. Similar declaración fue hecha por Unión Europea y por el ministerio de relaciones exteriores de Alemania y la cancillería francesa. En Paris, el embajador ruso fue llamado a consulta. Los alemanes manifestaron que las fundaciones germanas como la Konrad Adenauer realiza desde 1990, un trabo de fortalecimiento de la democracia, el entendimiento y las relaciones bilaterales.
Catherine Ashton, jefa de la diplomacia europea, emitió un comunicado manifestando su preocupación por las leyes rusas que atentan contra las libertades civiles.
El número de organizaciones bajo la pupila de la policía y fiscalía de Rusia aumenta a diario. La ola de auditorías es considerada una presión sobre la sociedad civil en Rusia, por aquellas que llevan años vinculados con estas. Pero es que no solo las filiales de organizaciones extranjeras en Rusia son las que tienen que abrir las puertas y archivos a los policías. También la policía investiga organizaciones de derechos humanos rusas como Memorial, Asistencia Pública, Agora, Veredicto Público, y otras.
Hasta el momento se han reportado que los fiscales e inspectores de hacienda revisan las registraciones y documentos de inscripción de 89 organizaciones sin fines de lucro de 24 regiones rusas. El lunes y el martes el total de comprobaciones era de 43 organizaciones no lucrativas en 16 regiones, aumentando en un 100 por ciento las oficinas bajo pesquisas en 24 horas
En la Fiscalía General de Rusia afirman que las comprobaciones de documentos ya se había planificado con anterioridad al tiempo que aseguran que están en el búsqueda de fuentes de financiamiento externo. Los fiscales amenazan con dar una “valoración jurídica” del trabajo de las estructuras regionales del Ministerio de Justicia, para determinar cuáles de ellas han combatido con celos a los “agentes extranjeros" entre las ONG.
La fiscalía ha pedido información adicional a varias organizaciones no gubernamentales como “Bellona”, dedicada al cuidado del medio ambiente o la Asociación Madres de Soldados, la Unión de Mujeres del Don y la Asociación de protección de los derechos de los votantes (Votos). También Vida sin drogas de Armavira, la Sociedad de Protección de los Consumidores, el centro de Kazan de derechos humanos y la Unión de Conservación de Aves de Saratov.
Curiosamente también preocupa a las autoridades rusas la Alliance Française de Samara, la parroquia de la Iglesia Católica Romana en Novocherkassk, y en Volgograd el centro cultural regional judío.
A través de un twitter, la embajada de EE.UU. en Rusia, manifestó que le había expresado a las autoridades rusas por los allanamientos. Similar declaración fue hecha por Unión Europea y por el ministerio de relaciones exteriores de Alemania y la cancillería francesa. En Paris, el embajador ruso fue llamado a consulta. Los alemanes manifestaron que las fundaciones germanas como la Konrad Adenauer realiza desde 1990, un trabo de fortalecimiento de la democracia, el entendimiento y las relaciones bilaterales.
Catherine Ashton, jefa de la diplomacia europea, emitió un comunicado manifestando su preocupación por las leyes rusas que atentan contra las libertades civiles.