El cantante y compositor cubano conocido como Manolín, el Médico de la Salsa, comentó en una entrevista en el programa radial 1800 Online que “Miami ha cambiado y crecido mucho”, en referencia al nivel de tolerancia de la opinión pública ante críticas al exilio.
“Tú críticas a Miami y te dicen: comunista, por qué no te vas para allá con Fidel? Qué es eso? Si yo estoy aquí, porque quería ser libre y porque critique allá a Fidel, pero no vine a adular a nadie, vine a seguir siendo como soy,” explicó el músico, que precisamente achaca su limitado éxito en Miami a estas malas interpretaciones.
Manolín, cuyo nombre de pila es Manuel González Hernández, tampoco ha podido olvidar la ocasión en que vio a muchos cubanos residentes en Miami ir a un concierto de los Van Van disfrazados por miedo a que no los botaran del trabajo. “Y para mí eso fue un trauma. Fue un insulto para mí en Estados Unidos ver eso. Tomé una actitud rebelde contra eso que vi.”
Pero la polémica por sus palabras siempre lo ha acompañado. El músico cubano se atrevió a afirmar que fue de los primeros cubanos (si no el primero) de los que ahora viven en el exilio, que cantó a los cubanos de Miami desde Cuba.
“Mami, hay que vivir para ver. Los tiempos cambian, tú vas a ver, ya tengo amigos en Miami,” tarareó, mientras recordaba los reclamos del entonces primer secretario del Partido Comunista en La Habana, Esteban Lazo al conocer de esta canción.
“Lazo me llamó y me dijo: ¿Tantas cosas que hay para cantarle y tú le cantas a Miami?” A lo que Manolín contestó: “¿Pero tú no dijiste los cubanos de Miami? Son cubanos, igual que tú y que yo.
”El autor de temas como La bola, A que me mantengo y Somos lo que hay, se aseguró siempre de no ‘deber favores’. No aceptó casa ni carro regalados. Prefirió comprarse un auto con el dinero ganado en sus presentaciones en Europa y casa propia no pudo tener, pues agentes de la Seguridad del Estado le advirtieron que de consolidar la compra ilegal que traía entre manos “perdería todo”, detalló.
El Médico de la Salsa conversó además sobre la poderosa influencia que han ejercido las mujeres en su vida, precisamente decidió estudiar Ciencias Médicas por seguir a su primer amor. Se definió como un músico que estudió Medicina, pero estas enseñanzas le han hecho el artista que es.
“La medicina ha redondeado mi vida. Esa relación con la vida, la muerte, las enfermedades, los seres humanos y todo lo que viven en las sala con pacientes, hace que vea la vida diferente, y desde la práctica. Por eso soy un artista diferente, por eso no me creo nada de la fama.”
La clave de su éxito en la música (y por qué no en la vida) ha sido justamente ser genuino. “La música no es como el deporte, nadie es mejor que nadie, lo importante es ser diferente.”
“Tú críticas a Miami y te dicen: comunista, por qué no te vas para allá con Fidel? Qué es eso? Si yo estoy aquí, porque quería ser libre y porque critique allá a Fidel, pero no vine a adular a nadie, vine a seguir siendo como soy,” explicó el músico, que precisamente achaca su limitado éxito en Miami a estas malas interpretaciones.
Manolín, cuyo nombre de pila es Manuel González Hernández, tampoco ha podido olvidar la ocasión en que vio a muchos cubanos residentes en Miami ir a un concierto de los Van Van disfrazados por miedo a que no los botaran del trabajo. “Y para mí eso fue un trauma. Fue un insulto para mí en Estados Unidos ver eso. Tomé una actitud rebelde contra eso que vi.”
Pero la polémica por sus palabras siempre lo ha acompañado. El músico cubano se atrevió a afirmar que fue de los primeros cubanos (si no el primero) de los que ahora viven en el exilio, que cantó a los cubanos de Miami desde Cuba.
“Mami, hay que vivir para ver. Los tiempos cambian, tú vas a ver, ya tengo amigos en Miami,” tarareó, mientras recordaba los reclamos del entonces primer secretario del Partido Comunista en La Habana, Esteban Lazo al conocer de esta canción.
“Lazo me llamó y me dijo: ¿Tantas cosas que hay para cantarle y tú le cantas a Miami?” A lo que Manolín contestó: “¿Pero tú no dijiste los cubanos de Miami? Son cubanos, igual que tú y que yo.
”El autor de temas como La bola, A que me mantengo y Somos lo que hay, se aseguró siempre de no ‘deber favores’. No aceptó casa ni carro regalados. Prefirió comprarse un auto con el dinero ganado en sus presentaciones en Europa y casa propia no pudo tener, pues agentes de la Seguridad del Estado le advirtieron que de consolidar la compra ilegal que traía entre manos “perdería todo”, detalló.
El Médico de la Salsa conversó además sobre la poderosa influencia que han ejercido las mujeres en su vida, precisamente decidió estudiar Ciencias Médicas por seguir a su primer amor. Se definió como un músico que estudió Medicina, pero estas enseñanzas le han hecho el artista que es.
“La medicina ha redondeado mi vida. Esa relación con la vida, la muerte, las enfermedades, los seres humanos y todo lo que viven en las sala con pacientes, hace que vea la vida diferente, y desde la práctica. Por eso soy un artista diferente, por eso no me creo nada de la fama.”
La clave de su éxito en la música (y por qué no en la vida) ha sido justamente ser genuino. “La música no es como el deporte, nadie es mejor que nadie, lo importante es ser diferente.”
