La Cumbre del G20 se desarrolla en una ciudad donde la policía cierra los museos y cualquier expresión de arte contra el mandatario es considerada fuera de la ley. En San Petersburgo acaban de confiscar varias pinturas, cerrar exposiciones de pinturas, detener a directores de museos y obligado a los pintores a pedir asilo en el extranjero.
Y es que en Rusia las estatuas y las pinturas se han convertido en elementos de protesta. Dos museos fueron cerrados en San Petersburgo, previo a la cumbre del G20, alegando que “no corresponden con la legislación del país”.
El primer afectado fue el Museo de la Autoridad, donde el 27 de agosto la policía se llevó varias pinturas del pintor Konstantin Altunin. Una de ellas, titulada Travestis, reflejaba al presidente Vladimir V. Putin en ropa interior femenina peinando al primer ministro Dimitri A. Medvedev, también en ajuar del sexo opuesto. Otro cuadro confiscado fue Los sueños eróticos de la diputada Misulina, aparece la legisladora autora de la ley que persigue a las minorías sexuales haciendo sexo oral. El Patriarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa Kiril, luce su cuerpo lleno de tatuajes, como un verdadero vor v zakone (los capos de las cárceles rusas) y sobre cada pecho un tatuaje de Lenin y Stalin. Se incautó también un lienzo enorme donde aparece un diputado local sobre la bandera de la comunidad gay. Este legislador quiere presentar una ley que castigue las bromas en el Internet contra los políticos.
En la muestra quedaron pinturas donde se ven a Brezhnev besando en la boca a Erick Honeker, Muamar al Gadafi, Stalin, Gorbachev, Lenin, la diputada y campeona olímpica y mundial Alina Kabaeva y otros políticos locales.
Nadie sabe a ciencia cierta cuáles son las pinturas que concuerdan con la legislación de Rusia, pero la administradora del museo ha sido detenida en dos ocasiones por la policía.
El segundo museo que la policía de esa ciudad selló sus puertas fue el Museo del Erotismo - "Punto G". Uno de los cuadros confiscado se llama Lucha, que muestra un desnudo con el mandatario ruso y colega estadounidense. Pero es que la obra en poder ahora de la policía, es una reproducción, mientras que el original está en Museo de Arte Erótico en Moscú.
Ese es el escenario a donde arribaron los mandatarios que asisten a la cumbre del G20. La buena noticia es que Barack Obama se reunirá con representantes de la sociedad civil rusa, como Liudmila Alexeieva, del grupo de Helsinki de Moscú y Premio Sajarov 2009; Lev Ponomarev, del grupo Por los Derechos Humanos; el abogado Pavel Chikov, y representantes de la organización LGTB en Rusia.
Hace varias semanas que se reportan protestas por la política discriminatoria de Rusia contra las minorías en todo el mundo. Los grupos LGTB expresan su rechazo frente a las sedes diplomáticas rusas en más de veinte países. Las protestas han sido en casi 40 ciudades, desde New York, Washington, San Francisco, El Salvador, Milán, Seattle, Toronto, Madrid, La Paz, Nicosia, Barranquilla, Alicante, Reikiavik, Estocolmo, Asunción, Tel Aviv, Valencia, Ciudad México, Vancouver, Barcelona, Monterrey, Londres, por solo citar algunas. En Rotterdam, Holanda, una estatua de Pedro Primero, fue pintada de rosa. El creador de la Rusia moderna, de la capital imperial, lucía un largo abrigo rosado y los labios pintados a los transeúntes de la ciudad holandesa. No hay dudas que es en protesta por la política homofóbica que se promueve desde el Kremlin.
Y es que en Rusia las estatuas y las pinturas se han convertido en elementos de protesta. Dos museos fueron cerrados en San Petersburgo, previo a la cumbre del G20, alegando que “no corresponden con la legislación del país”.
El primer afectado fue el Museo de la Autoridad, donde el 27 de agosto la policía se llevó varias pinturas del pintor Konstantin Altunin. Una de ellas, titulada Travestis, reflejaba al presidente Vladimir V. Putin en ropa interior femenina peinando al primer ministro Dimitri A. Medvedev, también en ajuar del sexo opuesto. Otro cuadro confiscado fue Los sueños eróticos de la diputada Misulina, aparece la legisladora autora de la ley que persigue a las minorías sexuales haciendo sexo oral. El Patriarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa Kiril, luce su cuerpo lleno de tatuajes, como un verdadero vor v zakone (los capos de las cárceles rusas) y sobre cada pecho un tatuaje de Lenin y Stalin. Se incautó también un lienzo enorme donde aparece un diputado local sobre la bandera de la comunidad gay. Este legislador quiere presentar una ley que castigue las bromas en el Internet contra los políticos.
En la muestra quedaron pinturas donde se ven a Brezhnev besando en la boca a Erick Honeker, Muamar al Gadafi, Stalin, Gorbachev, Lenin, la diputada y campeona olímpica y mundial Alina Kabaeva y otros políticos locales.
Nadie sabe a ciencia cierta cuáles son las pinturas que concuerdan con la legislación de Rusia, pero la administradora del museo ha sido detenida en dos ocasiones por la policía.
El segundo museo que la policía de esa ciudad selló sus puertas fue el Museo del Erotismo - "Punto G". Uno de los cuadros confiscado se llama Lucha, que muestra un desnudo con el mandatario ruso y colega estadounidense. Pero es que la obra en poder ahora de la policía, es una reproducción, mientras que el original está en Museo de Arte Erótico en Moscú.
Ese es el escenario a donde arribaron los mandatarios que asisten a la cumbre del G20. La buena noticia es que Barack Obama se reunirá con representantes de la sociedad civil rusa, como Liudmila Alexeieva, del grupo de Helsinki de Moscú y Premio Sajarov 2009; Lev Ponomarev, del grupo Por los Derechos Humanos; el abogado Pavel Chikov, y representantes de la organización LGTB en Rusia.
Hace varias semanas que se reportan protestas por la política discriminatoria de Rusia contra las minorías en todo el mundo. Los grupos LGTB expresan su rechazo frente a las sedes diplomáticas rusas en más de veinte países. Las protestas han sido en casi 40 ciudades, desde New York, Washington, San Francisco, El Salvador, Milán, Seattle, Toronto, Madrid, La Paz, Nicosia, Barranquilla, Alicante, Reikiavik, Estocolmo, Asunción, Tel Aviv, Valencia, Ciudad México, Vancouver, Barcelona, Monterrey, Londres, por solo citar algunas. En Rotterdam, Holanda, una estatua de Pedro Primero, fue pintada de rosa. El creador de la Rusia moderna, de la capital imperial, lucía un largo abrigo rosado y los labios pintados a los transeúntes de la ciudad holandesa. No hay dudas que es en protesta por la política homofóbica que se promueve desde el Kremlin.