Aunque todavía las contribuciones del sector cuentapropista al presupuesto del Estado en Cuba son marginales, sí han ido en aumento después de que el Gobierno impulsara la apertura del trabajo autónomo en 2010, informaron medios oficiales citando al director de Ingresos del Ministerio de Finanzas y Precios, Vladimir Regueiro.
El funcionario reportó un incremento de 18 por ciento en el sector desde octubre de 2010 hasta el mismo mes de 2013, lo cual según él se corresponde con las previsiones. Sin embargo, precisó que este aporte representa una contribución mínima de solo 2 por ciento con relación al total del presupuesto.
Regueiro indicó que las empresas estatales se mantienen como las mayores contribuyentes al Estado, aunque pronosticó que continuará el crecimiento de los "cuentapropistas" y otras formas “no estatales” (privadas) de trabajo, como las nuevas cooperativas de servicios aprobadas este año.
Ello resultaría en un nuevo incremento en 2014 de alrededor de 12 por ciento en los ingresos tributarios procedentes de esa esfera laboral, que representarían un 4 por ciento del total de las contribuciones fiscales.
Uno de los aspectos más criticados del impulso al trabajo por cuenta propia por parte del gobierno de Raúl Castro han sido los elevados impuestos de hasta 50 por ciento de los ingresos, más otros sobre las ventas, los servicios públicos y la contratación de trabajadores, así como una contribución a la Seguridad Social.
El funcionario reportó un incremento de 18 por ciento en el sector desde octubre de 2010 hasta el mismo mes de 2013, lo cual según él se corresponde con las previsiones. Sin embargo, precisó que este aporte representa una contribución mínima de solo 2 por ciento con relación al total del presupuesto.
Regueiro indicó que las empresas estatales se mantienen como las mayores contribuyentes al Estado, aunque pronosticó que continuará el crecimiento de los "cuentapropistas" y otras formas “no estatales” (privadas) de trabajo, como las nuevas cooperativas de servicios aprobadas este año.
Ello resultaría en un nuevo incremento en 2014 de alrededor de 12 por ciento en los ingresos tributarios procedentes de esa esfera laboral, que representarían un 4 por ciento del total de las contribuciones fiscales.
Uno de los aspectos más criticados del impulso al trabajo por cuenta propia por parte del gobierno de Raúl Castro han sido los elevados impuestos de hasta 50 por ciento de los ingresos, más otros sobre las ventas, los servicios públicos y la contratación de trabajadores, así como una contribución a la Seguridad Social.
