Un analisis que publica hoy el diario colombiano El Tiempo compara el sueldo mínimo en Venezuela, tras la devaluación del bolívar el lunes pasado, con los salarios en Cuba.
"Después de décadas de gozar de los mejores sueldos de Latinoamérica, gracias a una inagotable bonanza petrolera, el salario mínimo de Venezuela apenas es superior al de Cuba", asegura el periódico.
El sueldo mínimo de los venezolanos será 63 dólares, tras la nueva devaluación aplicada el 24 de marzo 2014, en la que el cambio de bolívares a dólares pasó de 11 bs por dólar a 51,86 bs por dólar, de acuerdo a lo establecido por el Sistema
Alternativo de Divisas (Sicad II).
Este proceso ha sido calificado por los detractores del gobierno de Nicolás Maduro como una megadevaluación.
"Hoy 24 marzo 2014, el tipo de cambio pasó de Bs/US$ 11 a Bs/US$ 55: aumento de 400% (cada bolívar compra 80% menos)", escribió el lider opositor Henrique Capriles en su cuenta en Twitter.
El líder opositor fue el primero en estimar que su país terminaría con salarios tan bajos como los de Cuba y se refirió a esta primera jornada del Sicad II (Sistema Cambiario Alternativo de Divisas) como "el lunes negro de Nicolás".
En Venezuela el sistema de control de cambio está controlado por el Estado que determina la comercialización y administración del mercado de divisas. La intención de mantener un sistema cambiario equilibrado se hace cada vez más difícil por el alto déficit fiscal de al menos 15 por ciento del PIB; una inflación por encima del 57 por ciento anual y una escasez de alimentos que en Caracas supera el 40 por ciento, entre otros factores.
Expertos citados por El Tiempo afirman que "la alta demanda por el billete verde llevó su cotización hasta los 51,8 bolívares, frente a la tasa oficial del dólar Cadivi de 6,3 dólares, lo que equivale a una devaluación del 723 por ciento". Además pronostican una mayor inflación con la perdida del poder adquisitivo.
"Lo que se viene en los próximos meses, sumado a los problemas mencionados, es una presión social por un aumento de salarios que permitan recuperar el poder adquisitivo del venezolano, así como mayores inyecciones de liquidez que traerán una mayor inflación", asegura la nota.
"Venezuela se ha convertido en un experimento de lo que puede llegar a suceder incluso en un país relativamente rico, cuando al tomar decisiones de política económica se ignoran hasta los principios más elementales de la economía moderna", explica el economista Hernán Vallejo, de la Universidad de Los Andes.
"Después de décadas de gozar de los mejores sueldos de Latinoamérica, gracias a una inagotable bonanza petrolera, el salario mínimo de Venezuela apenas es superior al de Cuba", asegura el periódico.
El sueldo mínimo de los venezolanos será 63 dólares, tras la nueva devaluación aplicada el 24 de marzo 2014, en la que el cambio de bolívares a dólares pasó de 11 bs por dólar a 51,86 bs por dólar, de acuerdo a lo establecido por el Sistema
Alternativo de Divisas (Sicad II).
Este proceso ha sido calificado por los detractores del gobierno de Nicolás Maduro como una megadevaluación.
"Hoy 24 marzo 2014, el tipo de cambio pasó de Bs/US$ 11 a Bs/US$ 55: aumento de 400% (cada bolívar compra 80% menos)", escribió el lider opositor Henrique Capriles en su cuenta en Twitter.
El líder opositor fue el primero en estimar que su país terminaría con salarios tan bajos como los de Cuba y se refirió a esta primera jornada del Sicad II (Sistema Cambiario Alternativo de Divisas) como "el lunes negro de Nicolás".
En Venezuela el sistema de control de cambio está controlado por el Estado que determina la comercialización y administración del mercado de divisas. La intención de mantener un sistema cambiario equilibrado se hace cada vez más difícil por el alto déficit fiscal de al menos 15 por ciento del PIB; una inflación por encima del 57 por ciento anual y una escasez de alimentos que en Caracas supera el 40 por ciento, entre otros factores.
Expertos citados por El Tiempo afirman que "la alta demanda por el billete verde llevó su cotización hasta los 51,8 bolívares, frente a la tasa oficial del dólar Cadivi de 6,3 dólares, lo que equivale a una devaluación del 723 por ciento". Además pronostican una mayor inflación con la perdida del poder adquisitivo.
"Lo que se viene en los próximos meses, sumado a los problemas mencionados, es una presión social por un aumento de salarios que permitan recuperar el poder adquisitivo del venezolano, así como mayores inyecciones de liquidez que traerán una mayor inflación", asegura la nota.
"Venezuela se ha convertido en un experimento de lo que puede llegar a suceder incluso en un país relativamente rico, cuando al tomar decisiones de política económica se ignoran hasta los principios más elementales de la economía moderna", explica el economista Hernán Vallejo, de la Universidad de Los Andes.