Desde el municipio de Plaza, donde está ubicado uno de los parques zoológicos de la capital, Miladys Carnel González denuncia que en sus instalaciones hay una fuente que no tiene el surtidor de agua funcionando, pero que se encuentra llena, por las lluvias ocurridas en estos días.
La fuente se encuentra al lado de las jaulas de los leopardos, y en su interior hay una gran suciedad, se acumulan las hojas de los árboles y latas de refresco. Muy significativa, además, es la presencia de huevos y larvas de mosquitos, acompañados de guajacones.
De todos es conocido que una especie de mosquito es el transmisor del dengue, enfermedad endémica del país, y que el Gobierno anuncia constantemente que combate en los hogares. Sin embargo, en este centro de recreación donde acuden tantos niños, y en particular en este lugar, no se hace algo para que los que se sienten en la orilla de la fuente no sean picados por estos infecciosos insectos.
Este zoológico es una construcción que se inauguró el 24 de octubre de 1939, durante el gobierno de Federico Laredo Bru. Su área total es de 24 hectáreas y fue instalado en la calle 26 en el Nuevo Vedado, reconocido por las figuras de dos venados que tiene a su entrada.
En la actualidad, ha sufrido muchos cambios, y sobre él influye el deterioro del pasar de los años y el abandono notable al que está sometido.