Activistas políticos y de derechos humanos criticaron este jueves al gobierno de Cuba por mantener abiertos un grupo de círculos infantiles a pesar de que el 11,4% de los contagiados en todo el país son niños.
En ese sentido la activista habanera Zelandia Pérez Abreu señaló que “se han tomado una serie de medidas efectivas como el cierre de las escuelas, sin embargo algunos círculos infantiles continúan recibiendo niños cuyas madres laboran en la Salud o el Ministerio de Comercio Interior (MINCIN), que son sectores que tienen que estar funcionando”.
Pérez Abreu es la directora de la independiente Comisión Cubana de Defensa Electoral grupo que está monitoreando las medidas que han tomado las autoridades para prevenir la expansión del Covid-19.
“Por ejemplo en el círculo infantil “Viet Nam Heroico”, ubicado en G y 15 en el Vedado, hay muy buena higiene pero las educadoras no están usando nasobucos ni guantes para manipular a los niños", dijo la activista.
“Cualquier persona puede portar este virus y no presentar sintomatología, no sé si a estas trabajadoras se les están haciendo los tests requeridos para estar seguros de que están sanas”, alertó.
“Mi opinión es que deben cerrarse todos los círculos infantiles, las madres que tienen párvulos no deben asistir a sus centros laborales”, afirmó la activista.
La ministra de Educación, Ena Elsa Velázquez, había asegurado a finales de marzo que los círculos infantiles seguirían abiertos en Cuba, incluso después del cierre de todo el sistema escolar debido a la expansión del COVID-19, porque hay madres que realizan actividades esenciales de la economía y los servicios.
“Creo que el Estado está poniendo por encima de la salud de los niños los intereses económicos y políticos”, puntualizó Fernando Palacios, director del Centro de Estudios Liderazgo y Desarrollo, con sede en la capital cubana.
“Los grupos más vulnerables son los ancianos y los infantes. En una pandemia lo principal es preservar la vida humana y mucho más la de los niños”.
El político argumentó que cree que esos pequeños están expuestos porque lo más recomendado por los especialistas para evitar contraer la enfermedad es el aislamiento social.
“Estamos hablando de Cuba, de un país donde no están creadas las condiciones materiales para evitar el contagio y no creo que tampoco los círculos infantiles las tengan”, acotó Palacios.
La cifra de menores de 16 años contagiados con la enfermedad en la Isla se elevó este jueves a 60.
“Mantener abiertos los círculos infantiles es un error, esos niños deben estar en sus casas”, consideró el bioquímico Oscar Casanellas. “Además yo estoy escandalizado porque el Ministerio de Salud Pública, MINSAP, no ha hecho una estrategia diagnóstica eficiente. Sospecho que están esperando a que las personas tengan síntomas para hacerles las pruebas”.
Según los últimos estudios realizados en el mundo sobre la pandemia los infantes pueden convertirse en transmisores asintomáticos.