El gobernador de Florida, Ron DeSantis, adelantó este lunes que los dos casos de coronavirus COVID-19 confirmados por las autoridades locales y federales "no serán los únicos" que se registrarán en el estado, aunque señaló que el nivel de amenaza de la enfermedad "se mantiene bajo".
El Departamento de Salud de Florida alertó el domingo de dos casos "presuntamente positivos" de coronavirus que habían sido localizados en el condado de Manatee y Hillsborough (oeste de Florida), los cuales esta tarde tuvieron la confirmación oficial de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés).
"Estamos anticipando que habrá más positivos. El segundo individuo contagiado en Florida no se había expuesto a nadie que hubiera viajado a los focos de contagio, por lo que abre la posibilidad de que haya más", indicó el gobernador durante una rueda de prensa ofrecida este lunes.
Los dos contagiados son una mujer que había viajado recientemente a Italia, que es uno de los países más afectados por el virus, mientras que el otro individuo es un varón de unos sesenta años que no había tenido contacto aparente con ninguna persona que hubiera viajado a alguno de los focos de infección. Ambos están estables.
Por el momento, quince pacientes analizados han dado negativo, mientras que hay otros seis casos a la espera de los resultados, 23 personas son examinadas y 184 personas se mantienen bajo vigilancia por haber viajado recientemente a Italia, China, Corea del Sur e Irán, países que se han visto afectados por esta epidemia.
"Nuestro objetivo es limitar el contagio, y creo que desde el principio el Departamento de Salud ha sido muy proactivo y diligente al respecto", señaló DeSantis.
El gobernador reiteró que las personas jóvenes y de mediana edad "sin ninguna condición previa" no corren peligro y no necesitarán ser hospitalizados, pero la prioridad son la población "más envejecida" que presentan enfermedades como diabetes o presión arterial alta, entre otras.
Además, anunció la posibilidad de recibir financiación adicional de parte del Congreso para ayudar al estado a controlar la propagación del virus, y más restricciones a nivel nacional en lo que se refiere a los viajeros que vengan desde países como Italia o Corea del Sur.
En Estados Unidos ya se han registrado cinco víctimas mortales por esta enfermedad en el extremo opuesto a Florida, en el estado de Washington.
La cifra de muertos por el coronavirus en todo el mundo se acerca a los 3,000, según la OMS.
El cirujano general del Departamento de Salud de Florida, Scott Rivkees, que ofreció más detalles sobre los casos en este estado, explicó que las pruebas para detectar el coronavirus se pueden realizar en Tampa, Jacksonville y Miami, y obtienen los resultados de 24-48 horas, mientras que los CDC suelen tardar de tres a cinco días.
Rivkees también ofreció una serie de recomendaciones como lavarse las manos con asiduidad o, en caso de desarrollar alguno de los síntomas, aislarse durante catorce días y contactar con las autoridades médicas hasta que los resultados de las muestras den negativo.
También explicó que el 80 % de los casos son leves, el 15 % precisan de ser hospitalizadas y que tan solo el 5 % son considerados como severos, por lo que "se puede seguir haciendo vida normal", aunque por el momento "no existe ninguna cura ni medicamento".
El turismo es el que más se puede ver afectado por estos casos y puede ser también una vía de contagio para el coronavirus, después de que el gobernador haya declarado la emergencia sanitaria en el estado.
El puerto de Miami recibió un total de 6,8 millones de turistas en 2019, lo que supone un récord para la ciudad, y unas 100 millones de personas visitaron Florida, lo que al mismo tiempo lo convierte en uno de los estados más susceptibles de propagación de esta enfermedad.
El COVI-19 Está presente en casi 60 países y hay 87.137 casos confirmados, según la Organización Mundial de Salud (OMS).