Aroldis Chapman alcanzó este lunes su salvamento número 14 de la temporada con los Yankees de Nueva York y elevó su récord de ponches a 750.
“El Misil Cubano” se convierte así en el pitcher con más juegos salvados (56) de todo el equipo, después del gran Mariano Rivera. En veinte años nadie más se acercó al medio centenar de rescates.
Chapman se enfrentaba como apagafuegos en el noveno episodio a Víctor Martínez, un esperanzado matador de los Tigres de Detroit, y con un lanzamiento que rompió hacia abajo, lo ponchó en el acto.
El Misil solo necesitó cuatro lanzamientos para cerrar su victoria 14 (en 15 apariciones) con los Bombarderos del Bronx.
El muchacho de Cayo Mambí, en la provincia de Holguín, ha venido desinflando su promedio efectivo hasta 1.46.
La historia del serpentinero cubano apunta a ubicarse entre las más destacadas de los cerradores de los Yankees e incluso de Grandes Ligas.
A Chapman le adelanta el panameño Mariano Rivera, con veinte campañas por el team de la Gran Manzana (1995-2013) y el primero en llegar a los 50 rescates en ese equipo.
En la lista de más apagafuegos con los Yankees encontramos nombres de lujo como Dellin Betances, Rafael Soriano, David Robertson y Andrew Miller, todos por debajo del medio centenar de salvados.
La cotización del Misil Cubano parece tener una clara justificación: los Yankees lo traspasaron en 2016 a los Chicago Cubs, equipo donde se llevó el anillo de Serie Mundial e inmediatamente los de Manhattan lo volvieron a recoger por la suma de $11 millones 325 mil dólares y le convencieron a firmar un contrato por $17 millones 200 mil dólares cada año hasta el 2021.
Para que se tenga una idea del ascenso del cubanito Chapman en el mercado beisbolero, baste comparar su primer salario de 1 millón de dólares en 2010 con los rojos de Cincinnati hasta esta friolera de hoy.
Nacido en Holguín, en 1988, Aroldis Chapman se sacudió rápidamente del grupo de pitchers de su generación y con las miras puestas en el gran espectáculo de Las Mayores, escapó de Cuba en 2009.
Los Rojos de Cincinnati lo llevaron a una granja de Triple-A y en su debut del 11 de abril de 2010 lanzó un juego de 4.2 innings, permitió una anotada sucia y ponchó a 9 bateadores. ¡Mejor, imposible!
Desde entonces, entre el cruce de los Rojos a los Yankees, su salto a los Chicago Cubs y el regreso a la Gran Manzana, Chapman es el ojo del huracán, toda vez que su velocidad supersónica es el terror de los bateadores debido a que muchos le temen a su récord de 105.1 milla por hora frente a J.J. Hardy, de los Cerveceros de Milwaukee el 18 de julio de 2016.