El músico cubano Boris Larramendi, ex integrante de la banda Habana Abierta, se presenta en concierto en la sede del proyecto Estado de SATS este miércoles, a pesar de los arrestos a varios de los organizadores del evento por los derechos humanos, confirmó el propio artista a martinoticias.com.
Larramendi, quien reside en España, viajó a Cuba precisamente con el propósito de presentar su música en el Primer Encuentro por los Derechos Humanos, invitado por los organizadores del evento, tras seis años alejado de la isla.
“No me apetece venir para nada, todos estos cambios que dicen que están habiendo y ya vemos lo que pasa realmente. Entonces, a mí no me interesa participar del teatro ese de la normalización, cuando en realidad al que no esté con ellos le pueden entrar a golpes y lo pueden desaparecer”, apuntó el cantautor, en referencia a los arrestos a activistas y el acto de repudio de los que ha sido testigo.
El músico también describió el clima de hostilidad que ha mantenido una multitud frente la sede de Estado de SATS durante gran parte del día, incluso han prometido a gritos que se presentaran allí mismo la Orquesta Revé y Arnaldo y su Talismán, con el propósito de opacar su concierto.
Larramendi se ha mantenido encerrado en la sede de Estado de SATS desde el lunes en la madrugada para evitar que las autoridades le impidieran luego el acceso como a otros participantes, una medida que juzgó necesaria porque “yo me olía que iba a pasar eso como otras veces, pues yo los sigo bastante por internet”.
Antes de recluirse en la residencia de Antonio G. Rodiles, coordinador de Estado de SATS, se presentó en el Bar Fabio en el Vedado, gracias a gestiones de su amigo Robertico Carcassés, pero reusó otros compromisos.
Aunque se adivina que interpretará sus temas más conocidos, como La Natilla, Rock and Roll con Timba y Asere, que volá, entre otros, Larramendi adelanta que este será un concierto espontáneo. A pesar de las pocas personas que han logrado atravesar el cerco de las autoridades y las turbas oficialistas, el asegura que está listo.
Larramendi tiene pasaje de avión para regresar a España este viernes, pero advirtió que está consciente de que podría ocurrir cualquier incidente con las autoridades, incluso se confesó sorprendido con que lo dejaran entrar, pues ha dejado clara su posición opositora en numerosas entrevistas en medios de prensa y manifestaciones.
Larramendi, quien reside en España, viajó a Cuba precisamente con el propósito de presentar su música en el Primer Encuentro por los Derechos Humanos, invitado por los organizadores del evento, tras seis años alejado de la isla.
“No me apetece venir para nada, todos estos cambios que dicen que están habiendo y ya vemos lo que pasa realmente. Entonces, a mí no me interesa participar del teatro ese de la normalización, cuando en realidad al que no esté con ellos le pueden entrar a golpes y lo pueden desaparecer”, apuntó el cantautor, en referencia a los arrestos a activistas y el acto de repudio de los que ha sido testigo.
El músico también describió el clima de hostilidad que ha mantenido una multitud frente la sede de Estado de SATS durante gran parte del día, incluso han prometido a gritos que se presentaran allí mismo la Orquesta Revé y Arnaldo y su Talismán, con el propósito de opacar su concierto.
Larramendi se ha mantenido encerrado en la sede de Estado de SATS desde el lunes en la madrugada para evitar que las autoridades le impidieran luego el acceso como a otros participantes, una medida que juzgó necesaria porque “yo me olía que iba a pasar eso como otras veces, pues yo los sigo bastante por internet”.
Antes de recluirse en la residencia de Antonio G. Rodiles, coordinador de Estado de SATS, se presentó en el Bar Fabio en el Vedado, gracias a gestiones de su amigo Robertico Carcassés, pero reusó otros compromisos.
Aunque se adivina que interpretará sus temas más conocidos, como La Natilla, Rock and Roll con Timba y Asere, que volá, entre otros, Larramendi adelanta que este será un concierto espontáneo. A pesar de las pocas personas que han logrado atravesar el cerco de las autoridades y las turbas oficialistas, el asegura que está listo.
Larramendi tiene pasaje de avión para regresar a España este viernes, pero advirtió que está consciente de que podría ocurrir cualquier incidente con las autoridades, incluso se confesó sorprendido con que lo dejaran entrar, pues ha dejado clara su posición opositora en numerosas entrevistas en medios de prensa y manifestaciones.
