La canciller federal de Alemania, Angela Merkel, y el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, conmemoran este lunes en la localidad húngara de Sopron, junto a la frontera con Austria, la primera gran fuga pacífica de ciudadanos de la Alemania comunista hace 30 años.
La conmemoración se abrió a las 10.00 hora local (08.00 GMT) con una misa ecuménica bilingüe en la Iglesia Evangélica de Sopron, cerca del punto de la frontera austro-húngara donde el 19 de agosto de 1989 tuvo lugar el llamado "Picnic paneuropeo".
La merienda campestre, organizada por el eurodiputado conservador alemán Otto von Habsburg y el reformista ministro húngaro Imre Pozsgay como un gesto de paz y apertura, incluyó la apertura de la frontera durante tres horas.
Uno 600 ciudadanos de la entonces República Democrática Alemana (RDA) aprovecharon la ocasión para huir a Occidente, una fuga masiva espontánea que no había sido esperada y que tuvo lugar de forma completamente pacífica.
Los historiadores ven hoy en ese evento un paso clave en el desmoronamiento del Telón de Acero que llevó finalmente a la caída del Muro de Berlín el 9 de noviembre de 1989, y la reunificación de Alemania.
Tras participar en la misa, Merkel y Orbán tienen previsto visitar el Ayuntamiento de Sopron. Ambos mandatarios almorzarán juntos y después, se dirigirán a la prensa.
Según el programa oficial del Gobierno alemán, por la tarde Merkel partirá desde Viena a Islandia, en visita oficial.