La seguridad cubana, que prepara la estancia del gobernante Raúl Castro en Mérida, no parece confiar del todo en las medidas adoptadas por las fuerzas mexicanas para garantizar la seguridad de las conversaciones con el presidente Enrique Peña Nieto, que comienzan el viernes en la capital yucateca.
"La estrategia pedida y ejecutada por el servicio secreto cubano empieza a notarse en Mérida", afirmó un reportaje publicado este jueves por el Diario de Yucatán.
El reportaje, firmado por Joaquín Chan Canal, afirma que "quizá a petición de las fuerzas de seguridad del presidente cubano" la policía federal mexicana participa en las operaciones de vigilancia "pero sin sus armamentos".
"Los federales sólo realizan recorridos protegidos por sus chalecos antibalas, las fundas de sus armas están vacías", afirmó el reportaje.
El Diario de Yucatán explica que marinos mexicanos, de élite por su alta fidelidad al país, tomaron posesión de lugares estratégicos de la zona hotelera y realizan rondas de vigilancia a pie.
La patrulla turística fija, que tiene la Secretaría de Seguridad Pública de Yucatán a un costado del hotel Fiesta Americana también fue retirada; en su lugar contrataron a un motociclista turístico.
El periódico que se edita en Mérida asegura que este jueves en la mañana llegó un avión de las fuerzas militares de Cuba con un numeroso grupo de elementos de la Guardia Nacional que se sumará a la vigilancia y protección del gobernante cubano durante su estancia de dos días en la ciudad.
"Digo de dos días porque los estrategas de la seguridad del presidente cubano al parecer modificaron la logística que preparó el Estado Mayor Presidencial y la Cancillería mexicana, por lo que la llegada de Raúl Castro sigue siendo una incógnita para proteger su integridad", afirmó el reportero.
"Se habla de que no llegaría este jueves sino mañana en las primeras horas, pero son rumores no confirmados por ninguna fuente oficial de los gobiernos mexicano y cubano", agregó.
