El ministro cubano del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, se reúne el martes con directivos y empresarios estadounidenses, como parte de una visita sin precedentes a Estados Unidos.
Medios locales cubanos informaron que Malmierca se reunirá en la Cámara de Comercio con su presidente, Thomas Donahue, y con el vicepresidente ejecutivo y jefe de Asuntos Internacionales, Myron Brilliant.
También tiene programada una reunión con el exsecretario de Comercio Carlos Gutiérrez, quien encabeza el Consejo Empresarial EEUU-Cuba (USCBC).
Creada en septiembre pasado, esta entidad busca impulsar las oportunidades de negocios tras el restablecimiento de las relaciones diplomáticas y eliminar el embargo comercial que aplica Washington a La Habana desde hace más de medio siglo.
Con Malmierca están en Washington el presidente de la Cámara de Comercio de Cuba, Orlando Hernández Guillén, y funcionarios de la Cancillería, del Banco Central y de empresas estatales de la isla, dijeron medios cubanos.
La delegación tiene previsto encuentros con representantes de compañías estadounidenses líderes en el turismo, biotecnología, maquinaria y la industria alimentaria.
La visita a la Cámara de Comercio buscará hacer un balance sobre la actual situación y determinar dónde están las principales barreras para el comercio, en momentos en que sigue vigente el embargo contra la isla de gobierno comunista.
Camino de doble vía
Este intercambio, que intenta mayor acercamiento entre los viejos enemigos de la Guerra Fría, sigue al ocurrido en noviembre pasado, cuando viajaron a la isla más de medio centenar de importantes empresarios norteamericanos, de compañías como American Airlines, Boeing, Heinz Krfat, Home Depot, Sprint y Stanley Morgan.
Como parte de la agenda de Malmierca para esta semana, ambos países tienen previsto celebrar una nueva ronda de su "Diálogo regulatorio" el próximo miércoles y jueves en Washington.
La secretaria de Comercio estadounidense, Penny Pritzker, será la contraparte de Malmierca en la reunión, a la que asistirán funcionarios del Tesoro y del Departamento de Estado.
Ambas partes esperan analizar "los cambios regulatorios aplicados el 27 de enero, relativos a la exportación y financiación de ciertos bienes y servicios autorizados por Cuba y los retos identificados por las empresas estadounidenses con negocios en Cuba".
Una de las quejas de Cuba es la imposibilidad de usar el dólar estadounidense en sus transacciones financieras debido al embargo comercial.
Al anunciar la reunión, Pritzker dijo que se trata de "otra oportunidad para trabajar directamente con nuestros colegas cubanos para entender mejor la manera en la que nuestros Gobiernos y economías pueden trabajar conjuntamente en apoyo del pueblo cubano".