La lluvia pudo apagar un incendio de grandes proporciones que duró más de una semana y arrasó con miles de hectáreas de pastos y bosques de la Meseta de Mayarí, dijeron medios locales, mostrando la incapacidad de instituciones estatales para hacer frente al incidente.
El fuego había comenzado el pasado 9 de abril en las cercanías de Birán, en el municipio de Cueto. Efectivos del cuerpo de guardabosques y trabajadores de empresas forestales y agropecuarias “tomaron parte en las acciones con los medios técnicos oportunos”, informó Granma.
En el intento sin éxito por extinguir el incendio, usaron buldócer y pipas, según informó Estrella Segura, presidenta del Consejo de Defensa de Mayarí.
“El fuego (…) quedó neutralizado debido a una fuerte lluvia desatada en la región”, dijo el diario.
Los reportes de áreas afectadas no coinciden. Granma aludió a más de 4.000 hectáreas, mientras que la televisión local, -citada por la agencia EFE-, informó sobre más de 5.000 hectáreas dañadas a causa del incendio.
El fuego fue catalogado como "el más grande" ocurrido en los últimos años en la región oriental.
"Bendita esa lluvia"
La nota de Granma no aludió a la participación del cuerpo de bomberos. Tampoco fueron explicadas las causas del siniestro.
La televisión cubana dijo, sin embargo, que "el fuego se originó por una negligencia humana en la empresa pecuaria "6 de agosto", en la localidad de Birán, donde se localiza la casa natal del fallecido dictador cubano Fidel Castro.
El reporte no aclaró si alcanzó el sitio que es considerado "histórico" y que suele ser visitado por extranjeros que visitan el país.
El fuego se propagó por la cordillera de la Sierra Cristal hasta llegar a la zona Pinares de Holguín. Las llamas avanzaron del norte al suroeste a más de 50 kilómetros por hora.
El domingo el incendio había alcanzado al municipio de Mella. Un lector de la edición digital de Granma expresó: "Bendita esa lluvia".
Tampoco pudo con el incendio en esa zona ni el cuerpo de guardabosques del Ministerio del Interior, ni las brigadas del Ministerio de la Agricultura ni los pobladores convocados por autoridades del Partido Comunista.
“Las labores de extinción se hicieron complejas porque tenían por escenario elevaciones con abundantes pinos, además de mucho material combustible formado por la acumulación de restos de vegetación derribada por huracanes”, comentó Granma.
En febrero pasado, el Cuerpo de Guardabosques de Cuba instó a "extremar" el cumplimiento de las medidas para evitar incendios que tienen el período más crítico hasta el 31 de mayo. La situación se agrava por la sequía que afecta al país.
Cifras oficiales indican que en 20115 ocurrieron 506 incendios forestales que dañaron más de 5.788 hectáreas. Los sitios más afectados fueron Pinar del Río, Matanzas, Camagüey, Holguín y Granma. Las pérdidas fueron calculadas en 34 millones de pesos, equivalente a más de un millón de dólares.
(Con información de Granma y EFE)
