Los daños sicológicos y el rebrote de enfermedades como el dengue, Zika o chikungunya, son apenas parte del saldo negativo que podría ocasionar el paso arrollador del huracán Matthew por el extremo oriental de Cuba, dijeron expertos consultados el jueves por Radio Martí.
Baracoa, Imías, Maisí y San Antonio del Sur, -situados en la provincia de Guantánamo-, fueron los más afectados por el violento ciclón que se matuvo varias horas estacionario el miércoles, arrasando con casas, techos, oficinas del Estado y sembrando el terror entre los habitantes.
Testigos dijeron a Radio Martí que aún están incomunicados los territorios de Maisí e Imías.
Activistas explicaron también que escasean en la zona el agua y los alimentos, en momentos en que aún no llega la ayuda internacional.
El clínico santiaguero, Arnoldo de la Cruz, alertó desde Santiago de Cuba sobre las principales enfermedades que pueden afectar a las poblaciones impactadas por Matthew.
“Principalmente infecciones contagiosas como el dengue, el Zika, el chikungunya, que como ya son enfermedades que están establecidas, lógicamente con el paso del huracán Matthew se incrementan las oportunidades de que se exacerben estas enfermedades porque las condiciones climatológicas lo permiten", expresó.
El epidemeólogo aludió a que la temperatura es mucho más adecuada para que estas enfermedades proliferen "porque el mosquito tiene mejores condiciones".
Además explicó que "podrían proliferar las enfermedades gastrointestinales virales y bacteriales".
FOTOGALERÍA. El espanto de Matthew en el rostro de los cubanos
Daños sicológicos
Otro experto consultado por Radio Martí, el siquiatra residente en Miami, José Acosta, aludió a la ansiedad que produce en la gente el destroso que deja este tipo de eventos.
"Después que se produce un evento de esta categoría, la solución la tendría la gente,si tuviera solución, pero si hay pérdidas materiales y no tienes la solución, la ansiedad se incrementa ante la perspectiva de que tienes que enfrentar algo para lo que no tienes solución", comentó.
"Cuando te enfrentas a una situación como esta y no tienes ni a mediano o largo plazo solución, esa ansiedad se incrementa por la espera ansiosa de lo que puede ocurrir en el futuro, y si como en este caso las pérdidas no son recuperables (...) imagínate cómo esa ansiedad se va a incrementar en la población", agregó.
Imágenes de Baracoa muestran los rostros abatidos de hombres, mujeres, ancianos y niños en medio de la destrucción de sus hogares. Algunas fotografías aparecen damnificados con objetos en las manos que han recuperado entre los escombros.
El periodista independiente Félix Llerena dijo que los afectados por el huracán están necesitados de agua y alimentos.
“No se les ha dado ni pomos de agua, ni agua potable como hemos visto en otros países”.
No obstante, explicó que "organizaciones de otros países como Estados Unidos y Venezuela han brindado su ayuda solidaria pero no ha llegado aún ninguna ayuda internacional".
"Recordemos que la mayoría de los alimentos que se reparten son de donaciones internacionales porque de aquí no se reparte ningún alimento gratis o en grandes cantidades cuando hay un huracán, casi siempre es cuando hay donaciones internacionales”, expresó.
Llerena explicó también que el servicio eléctrico en Baracoa "se va a demorar días en reponerse porque la devastación en ese servicio es enorme. "Hay decenas de postes caídos en Baracoa y sus alrededores, el cableado eléctrico está caído".
Marco Antonio Morán dijo desde Guantánamo que en la capital de la provincia "no hay mucho daño", pero reiteró que la situación en Baracoa es crítica.
"Hay bastante daño en la zona de Baracoa, el telecentro perdió la cubierta, el hotel La Rusa perdió la cubierta, hay puentes caídos, ayer no se podía pasar por una zona de aquí de Yateritas porque la fuerza del mar y las olas metieron las rocas en la carretera y toda esa zona de ahí estaba incomunicada", comentó.
"En Imías hay un puente destruido que todavía no se ha podido llegar a esa zona por vía terrestre. La Farola también tiene derrumbes, están allí con los pocos recursos que tienen (...) ahí había un contingente de trabajadores de la electricidad en Santiago de Cuba que llegaron antes de que pasara el huracán", dijo Morán.
