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Cuba: los presos políticos cubanos que podrían ser liberados


Varios militares custodian a dos reclusos en la prisión Combinado del Este, en La Habana, durante una visita realizada por la prensa nacional y extranjera acreditada en la isla (9 de abril, 2013).
Varios militares custodian a dos reclusos en la prisión Combinado del Este, en La Habana, durante una visita realizada por la prensa nacional y extranjera acreditada en la isla (9 de abril, 2013).

Muchos de los 53 presos políticos cubanos de una presunta lista a liberar, aparentemente están aún en prisión y los familiares de los que podrían ser liberados están desesperados por noticias.

Ernesto Borges, un oficial de contrainteligencia entrenado por la KGB, está en una prisión cubana desde hace 16 años, acusado de intentar pasarle secretos a un diplomático de Estados Unidos en Cuba.

Haydee Gallardo, de 51 años, es un ama de casa que se involucró en la política hace solo dos años porque creía que sus hijos habían sido encarcelados injustamente por delitos comunes. Se unió al grupo opositor conocido como Damas de Blanco y tanto ella como su marido fueron puestos tras las rejas después de gritar consignas contra el Gobierno en mayo.

Armando Sosa era parte de un pequeño grupo de exiliados armados capturados cuando llegaron a Cuba, al parecer con la intención de iniciar una insurrección. Ha estado en la cárcel durante 20 años.

Los tres tienen poco en común, pero sus casos representan el de docenas de personas que ahora están bajo los reflectores después que Cuba se comprometiera a liberar a 53 personas consideradas presos políticos por el Gobierno de Estados Unidos.

La liberación de prisioneros es parte de un acuerdo cerrado el mes pasado entre Washington y La Habana para retomar las relaciones diplomáticas entre los viejos enemigos, que buscan acabar con más de cinco décadas de hostilidades mutuas.

El Departamento de Estado norteamericano dijo el martes que algunos habían sido puestos en libertad, pero no dijo cuántos ni quiénes eran. Tampoco el Gobierno cubano ha dicho quiénes son los presos en la lista ni cuándo serían liberados.

Los familiares de los que podrían ser liberados están desesperados por noticias. "No sabemos nada acerca de lo que está pasando. Nadie nos ha dicho nada", dijo con la voz quebrada por la angustia Reinyer Figueredo, de 32 años de edad, hijo de Gallardo y de su esposo Ángel Figueredo. El hombre dijo que su madre sufre de asma y de hipertensión arterial y que ha perdido peso desde su detención.

Grupos disidentes en Cuba dicen que hay cerca de 100 personas tras las rejas por razones políticas –incluyendo a Gallardo, Borges y Sosa– y que la mayoría de ellos fueron encarcelados por participar en manifestaciones pacíficas.

Eso significa que decenas de presos no serían beneficiados por el acuerdo entre Estados Unidos y Cuba. El Gobierno de Cuba suele acosar a activistas disidentes. La pasada semana, por ejemplo, fueron detenidos varios prominentes opositores por uno o dos días para impedir que asistieran a una manifestación organizada por una artista plástica.

Los funcionarios estadounidenses dicen que 53 presos serán liberados. Pero el gobernante cubano Raúl Castro hasta ahora ha hablado sólo de la liberación de un número de personas por las que el Gobierno de Estados Unidos "había mostrado interés".

Los prisioneros se han convertido en una prueba de fuego para el plan de retomar las relaciones Estados Unidos-Cuba.

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