Un nuevo capítulo de la serie "Vamos por ti y por tu familia", del proyecto independiente Estado de Sats, aborda el tema de la represión del régimen cubano contra los hijos de los opositores para lograr que estos dejen de participar en las actividades que convocan las organizaciones a las que pertenecen.
Vamos por ti y por tu familia (parte III) recoge los testimonios de dos niñas y una adolescente sobre las acciones que han tomado contra ellas en las escuelas, y que van desde el abuso y las agresiones de otros niños hasta la indiferencia de los maestros a la hora de tomar una determinación ante ese tipo de situaciones discriminatorias.
La Dama de Blanco Yurleany Tamayo, y su esposo, Daniel Hodelin Ferrer, padres de las pequeñas Laura y Lía Ferrer, aseguran que a ellos los citan con frecuencia a la escuela de las niñas, y los maestros les dan quejas que ellos rechazan porque creen que son usadas para chantajear a los padres.
Piensan que los agentes quieren buscar la forma de enviar a las menores a escuelas de conducta, para castigar a los padres por el activismo en los grupos opositores.
La Dama de Blanco Micaela Roll aseguró que un profesor dijo que como ella era opositora su hija, Cheyla Mederos, debía dejar la escuela.
La joven hace un año que dejó los estudios, y ahora "está en la casa sin hacer nada porque ha acudido a varias escuelas y no la aceptan", precisó Roll, quien tiene un hijo varón mayor de edad "al que tampoco le dan trabajo en ninguna parte".
Roll insistió en que "lo han chantajeado y le dicen que no va a conseguir trabajo hasta que su mamá deje las Damas de Blanco".
A las aseveraciones anteriores se suman las de otras dos Damas de Blanco, Daisy Artiles y Yamila Lamoth, quienes en la segunda parte de la serie Vamos por ti y por tu familia ofrecieron el testimonio de lo que han sufrido ellas y su familiares desde el momento en que decidieron incorporarse a la oposición.
Artiles enfatizó en que las Damas de Blanco saben que “el Dictador Raúl Castro, sus esbirros y sus pandillas no tienen poder moral, ni prestigio, ni valor ante ellas, que están enfrentando los abusos y atropellos”.
Aseguró que ellas seguirán en las calles, “resistiendo”, porque saben que “a la dictadura le queda muy poco”.
(Con declaraciones de opositores cubanos al equipo de realización de Estado de Sats)