La activista cubana Rosa María Payá y el grafitero cubano Danilo "El Sexto" Maldonado expusieron en el Oslo Forum Freedom una realidad de la que el régimen de Cuba no habla.
En sus intervenciones, ambos jóvenes hablaron de sus orígenes, de la vida en Cuba, de las raíces familiares que los llevaron a determinarse a vivir en libertad y trabajar por la contrucción de un país democrático.
Con el título "Camino a la Justicia", Rosa María Payá habló de su padre Oswaldo Payá, y su amigo Harold Cepero, y reiteró que fueron asesinados por el gobierno, y no murieron en un accidente automovilístico, como el régimen ha dicho.
Payá también habló de la iniciativa ciudadana Cuba Decide, que busca forzar al régimen de la isla a reconocer el derecho de todos los cubanos a determinar su propio sistema usando una herramienta específica -un Plebiscito que determine el futuro del país por primera vez en casi sesenta años.
Con el tema "Los que no callan", Danilo Maldonado agradeció el premio Vaclav Havel que hace un año se le concedió, y que no pudo recoger por estar en una cárcel en la isla.
El joven habló del derecho del hombre a la libertad desde su perspectiva como artista. Recordó cuando tenía nueve años e hizo un dibujo de Fidel Castro con su uniforme de militar, pero con cabeza de mono, y luego a los veinte, cuando decidió convertirse en el antihéroe "El Sexto" durante la campaña del régimen a favor de "Los cinco" espías cubanos
arrestados en Estados Unidos.
Maldonado cree que "el arte puede servir como catalizador de cualquier cambio, como predecesor", declaró en una entrevista concedida a la agencia de noticias EFE, donde también afirmó que "una idea puede destrozar lo que sea", hasta un régimen".
"Quiero derrotar a una dictadura que ha durado durante muchísimo tiempo en mi país, desmitificarla y desmitificar los falsos cánones que se vendieron, como el del Che Guevara", afirmó el artista, y dijo que seguirá en Cuba y dará su vida por el que considera su deber: "despertar" las conciencias.