Este lunes el Ministerio de Salud Pública de Cuba confirmó 938 nuevos casos para un acumulado de 102 441 positivos al COVID-19 y 597 fallecidos.
Según el reporte, permanecen hospitalizados 23,056 pacientes, de los cuales 5,466 son casos activos, 3,302 tienen síntomas sospechosos y el resto están en vigilancia epidemiológica.
En las últimas 24 horas al menos 158 menores de 20 años fueron confirmados, de ellos, 136 tienen menos de 18 años, para un total acumulado en ese rango de edad de 12 976 pacientes.
Por provincias, La Habana reportó el mayor número de nuevos contagios con 600, seguida por Matanzas con 76, Santiago de Cuba 52, Granma 49 y Sancti Spíritus 25.
La provincia de Matanzas presenta una tasa de mortalidad por coronavirus por encima de la del mundo, afirmó el ministro de Salud Pública, José Ángel Portal Miranda, durante una reunión de trabajo del Consejo de Defensa Provincial.
Desde este lunes, comienzan a aplicarse nuevas medidas restrictivas en la provincia de Pinar del Río, donde solo irán a trabajar quienes aparezcan en los listados actualizados, y se implementó un documento de “permiso de movilidad ciudadana”, que autoriza a una persona por núcleo a salir a la calle. Cualquier persona que intente transitar sin el salvoconducto será multada por el monto de 2 mil pesos por el delito de propagación de epidemias.
En la provincia de Sancti Spíritus, también fueron impuestos nuevos límites a la movilidad ciudadana, mientras que continúa el desabastecimiento de alimentos y medicamentos en todo el país, dijeron a Radio Televisión Martí, cubanos residentes en la isla.
Desde Los Arabos, en Matanzas, nos cuenta el director del Instituto Cubano de Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP), Alberto Corzo, que allí la situación es crítica, están cerrados y no hay forma de adquirir alimentos.
“En estos momentos tenemos cinco centros de aislamiento en el municipio, donde son pésimas las condiciones, producto del alto índice de contagio con la Covid-19 en el territorio”, dijo Corzo.Mientras los residentes del poblado de Torriente en Jagüey Grande, cumplen 28 días confinados y desabastecidos.
“El fin de semana estaban todas las bodegas que parecían colmenas de abejas, detrás de una porción de pollo que mandaron ahora por la canasta básica y el pan diario”, declaró desde este territorio yumurino el activista Alexander Águila Sosa.
En Pinar del Río, Katia Hernández Torres, que es miembro de la Federación Latinoamericana de Mujeres Rurales (FLAMUR) señala que la policía política podría utilizar este nuevo confinamiento para incrementar el acoso en contra de los disidentes.
“Es increíble esto que está sucediendo, seguir encerrándonos en las casas, sin alimentación y sin nada, cuando la mejor opción es la vacuna”, nos dijo Katia.
Las nuevas medidas en Sancti Spíritus prohíben salir a la calle entre lunes y viernes después de las 6 de la tarde y los sábado a partir de las 4 pm, mientras que el domingo la prohibición es el día entero, reporta el periodista independiente Adriano Castañeda.
“Se le fue de la mano la situación con la pandemia al gobierno, es crítica la falta de comida y medicamentos, hay hambruna en la ciudad”, señaló Adriano.
Santiago de Cuba sigue desabastecida y la gente en la calle haciendo colas, y después de las 8 de la noche hay efectivos patrullando la ciudad, arrestan y multan al que encuentran, destaca el activista de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), Vladimir Martín Castellanos.
“Tropas Especiales deteniendo a la gente en diferentes puntos de la ciudad, quienes reciben una multa de 2 mil pesos en moneda nacional por violar el protocolo establecido”, afirmó Ovidio.
El comunicador habanero Vladimir Turró, cuenta que en el municipio Arroyo Naranjo hay un brote de sarna (escabiosis) y no hay medicamentos, también sufren el desborde de fosas y las aguas negras corren por las calles, sin que las autoridades solucionen esta situación.
“El régimen cubano no está empeñado ahora mismo en solucionar el déficit de medicinas y de alimentación para acabar con esta pesadilla que estamos viviendo”, enfatizó Turró.
Desde Santa Clara, el opositor Guillermo del Sol, alerta sobre el incremento de la represión y las multas en medio de un faltante total de alimentos.
“Ya la libra de carne de cerdo alcanzó los 150 pesos, la libra de pollo (por la izquierda) llegó a los 80 pesos y el litro de aceite 300 pesos, pero no es solamente el alto costo, lo peor es que no lo hay”, comentó el activista.
