Un enorme pedazo de fachada de un antiguo inmueble colapsó en la tarde de este jueves y arrojó toneladas de escombros en plena calle, justo frente al Capitolio Nacional, en el corazón de La Habana. Un par de obreros subidos a una jaula, colgada a su vez de una grúa, realizaban labores de demolición cuando parte del edificio cayó repentinamente hacia el lado “equivocado”.
El susto provocó que algunos salieran corriendo, agentes del orden incluidos.
Fue un verdadero milagro que nadie resultase herido durante el suceso, pues aparentemente la brigada de demolición no había planificado algo así. Los pedazos de mampostería cayeron también sobre la grúa que sostenía la plataforma de los demoledores, y el desprendimiento del muro levantó una nube de polvo que detuvo por momentos la circulación por la céntrica calle Prado.
Antes de que ocurriera el derrumbe, la zona se encontraba escasamente acordonada y sólo un policía de tránsito intentaba controlar, sin mucho éxito, que los transeúntes no atravesaran la calle Teniente Rey, cubierta pocos segundos después por los restos del edificio.
Esta es una zona de gran circulación, donde suele haber también muchos turistas. Algunos caminantes, por pura intuición, al ver lo precario de las obras se estaban bajando de las aceras y caminaban sobre el asfalto, a pocos centímetros del tráfico vehicular.
El edificio en cuestión estaba deshabitado desde hacía meses, cuando parte de sus cimientos comenzaron a hundirse. Entonces sus arcos fueron apuntalados y sus columnas reforzadas, pero ello no pudo impedir que las paredes se desplomaran cada vez más. Bastaba un simple empujón para que la estructura colapsara, y eso fue precisamente lo que ocurrió este jueves.
Incluso se había dispuesto parcialmente una valla perimetral metálica, que quedó arruinada tras el incidente. Pero la forma en que el inmueble acabó de derrumbarse, aunque no tuvo mayores consecuencias, indica que dicha medida de seguridad no habría sido suficiente.
La situación de la vivienda en Cuba es crítica. El antiguo edificio de viviendas presentaba una situación similar a la de muchos inmuebles por todo el país. En los municipios más poblados del centro de la capital, como La Habana Vieja y Centro Habana, el estado constructivo general es pésimo y continúa deteriorándose.
(Publicado originalmente en Cubanet el 11/09/2015)