Jorge Emilio Pérez de Morales Sante, empresario cubano al que reclama la justicia de Estados Unidos, ha sido arrestado en Madrid por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil Española, informa el diario ABC.
Morales Sante es acusado de haber blanqueado 238 millones de euros procedentes del Medicare mediante un entramado empresarial. Llevaba 5 años residiendo en España, junto a su familia, indica ABC. Aunque tenía residencia en la isla, según la ficha de Interpol, ubicada en 5ta. Avenida No. 26606, entre 266 y 268, Santa Fe, municipio Playa, La Habana.
Su hermanastro, Eduardo Pérez de Morales, cumple condena de tres años de cárcel en Estados Unidos por el mismo delito, al declararse responsable de participar en el entramado.
La policía española hizo efectiva la orden de arresto el 28 de julio al existir una circular de Interpol para la captura de Jorge Emilio Pérez de Morales Sante, nacido en La Habana el 7 de junio de 1964.
En octubre del 2012 fiscales federales en Miami presentaron cargos contra el cubano fundador de la compañía de envío de dinero Caribbean Transfers, a través de la cual fueron a parar al a los bancos cubanos 30 millones de dólares robados al programa Medicare en el sur de la Florida. Además de la ciudadanía cubana poseía la nacionalidad dominicana.
Según documentos de las autoridades estadounidenses, entre octubre de 2006 y aproximadamente marzo de 2011, Jorge Emilio y su hermanastro Eduardo, de 29 años, junto a Óscar Sánchez, Felipe Ruiz, Kirian Vega y otras personas no identificadas utilizaron la empresa para lavar un total de 238.067.956 dólares (202.198.026 euros, al cambio actual).
El «modus operandi», según el Ministerio Público y el propio juez del caso, consistía en utilizar Caribbean Transfers para inyectar grandes cantidades de dinero a defraudadores del sistema Medicare en Estados Unidos. Estos, a cambio, suministraban las ganancias a través de empresas pantalla en Canadá y México, pasando por Trinidad y Tobago y Cuba, donde el régimen comunista mediante sus militares es el dueño de las empresas.
El papel de Pérez de Morales Sante habría sido el de proveer de dinero limpio (que realmente eran las remesas que los exiliados cubanos de Florida enviaban a sus familiares a la isla caribeña) a esos estafadores del servicio médico en el mencionado estado, además de Michigan, Tennessee y Nueva York.
La manera que tenían de engañar al Medicare era enviando facturas falsas a ese seguro de salud. Después de recibir millones de dólares por ello, firmaban cheques o realizaban transferencias a cuentas bancarias de los mencionados países americanos.
Esas cantidades eran vueltas a enviar a Cuba (donde estaba radicada la empresa del encausado, cosa que sólo es posible con el visto bueno de las autoridades) y, luego, los Pérez de Morales desembolsaban el efectivo a los defraudadores originales.
El FBI estima que docenas de estafadores del Medicare han huido a Cuba donde han encontrado santuario seguro desde hace varios años. Se calcula que unos 150 cubanos acusados de estafa al Medicare están en la isla con el beneplácito de las autoridades.
En la Florida florecen casos de fraude
El Instituto de Estudios Cubanos y Cubano-Americanos de la Universidad de Miami, hizo público en 2011 una evalución hecha por la investigadora Vanessa López sobre el estudio realizada por su proyecto Cuba en Transición, en relación con el multimillonario fraude al Medicare en EE.UU, el cual apunta a la complicidad de las autoridades comunistas con el mismo.
Menciona el caso del ex teniente coronel Vicente Renier Rodríguez Fleitas, que sirvió en las Fuerzas Armadas de Cuba. Rodríguez Fleitas estuvo en Angola y el Congo bajo la bandera cubana, y sin embargo, se encontró viviendo en la Florida, cometiendo fraude al Medicare.
Entre diciembre de 2009 y marzo de 2010, su compañía, Pirifer Farmacia y Descuento, facturó a Medicare $ 1.8 millones en reclamaciones falsas. La defensa de Rodríguez Fleitas alegó que éste no era más que un peón de los demás. Sin embargo, sus relaciones con Cuba han levantado algunas banderas rojas y el FBI continúa investigando el caso.
Parece claro que el Gobierno cubano es parcialmente responsable por el número desproporcionadamente elevado de casos de fraude al Medicare en la región, apunta el estudio de UM. "Su asistencia a este delito grave y costoso que no puede pasarse por alto, y su constante complicidad con los criminales de EE.UU, sólo por su beneficio económico, es ofensivo para los ciudadanos de EE.UU. respetuosos de la ley que en última instancia, deben pagar por los miles de millones de dólares en el fraude que se deriva de la asistencia prestada por el Gobierno de Castro.”.
En el caso de los hermanos Benítez se destaca que llegaron a Estados Unidos en 1995 y se hicieron ciudadanos cinco años después.
Otro estudio publicado en Caféfuerte en el 2014 señala a 27 cubanos cuya pista era seguida por la Interpol a pedido de EEUU, Ecuador, Panamá, República Cubana y la propia Cuba. Muchos de los implicados tenían cuentas pendientes relacionadas con fraude al sistema de salud de EEUU.
(Redactado por Armando de Armas con información de ABC, Caféfuerte y ....