Si la Serie del Caribe de Béisbol comenzó con dos cubanos como regulares al campo –Bárbaro Cañizares con México; Donell Linares con República Dominicana--, otro exjugador de la Isla, el tirador zurdo Sergio Espinosa, negoció este lunes como relevista el primer triunfo de Puerto Rico, 6-4 sobre el equipo de Quisqueya en diez entradas.
Espinosa, conocido por su corajudo trabajo como cerrador con la Isla de la Juventud, retiró a dos hombres de Leones del Escogido cuando entró a la lomita, con un corredor a bordo, y además de estropear el invicto dominicano (3-1) les brindó al fin aliento a los boricuas Criollos de Caguas (1-3).
Las dos anotaciones decisivas cristalizaron por cuadrangular del segunda base y bateador zurdo Rey Navarro, una conexión descrita por el narrador hispano de la televisión como “una salvajada, después de no haber alineado la noche anterior por un dolor de panza”. Después ESPN amplió con que Navarro -- se fue de 5-2 con cuatro carreras impulsadas-- ha perdido seis libras por un virus estomacal.
En el mismo encuentro, el abridor derecho Michael Nix, en estado gripal desde la final en Puerto Rico, ponchó a cuatro y aguantó en dos anotaciones durante cinco innings a la poderosa artillería dominicana. Por los derrotados, el cubano Donell Linares falló dos veces, con una base por bolas y un pelotazo y descendió a .214.
A segunda hora, cuatro serpentineros de los Yaquis de Obregón lograron la lechada de México, 2-0 sobre los venezolanos Navegantes del Magallanes; un error en la primera entrada, seguido por bambinazo del jugador de campo corto Alfredo Amézaga decidieron el choque.
El cubano Cañizares fue esta vez a la banca de México (2-2), y su puesto de bateador designado lo ocupó el zurdo Karim García, dominado en tres ocasiones y ahora con promedio de .182. Venezuela suma igualmente 2-2, con dos fechas por delante en el round robin.
Hoy juegan Puerto Rico-Venezuela y República Dominicana-México. Mañana lo harán República Dominicana-Venezuela y México-Puerto Rico; los dos mejores en la tabla de posiciones decidirán el cetro en un programa adicional, un sistema nunca antes utilizado en las Series del Caribe.
En 2012, en su patio, Leones del Escogido se coronó cuando exhibía récord de 4-0; entonces los fanáticos dominicanos se fueron a festejar fuera del estadio, que sufrió una brusca caída en la venta de boletos de entrada.
Espinosa, conocido por su corajudo trabajo como cerrador con la Isla de la Juventud, retiró a dos hombres de Leones del Escogido cuando entró a la lomita, con un corredor a bordo, y además de estropear el invicto dominicano (3-1) les brindó al fin aliento a los boricuas Criollos de Caguas (1-3).
Las dos anotaciones decisivas cristalizaron por cuadrangular del segunda base y bateador zurdo Rey Navarro, una conexión descrita por el narrador hispano de la televisión como “una salvajada, después de no haber alineado la noche anterior por un dolor de panza”. Después ESPN amplió con que Navarro -- se fue de 5-2 con cuatro carreras impulsadas-- ha perdido seis libras por un virus estomacal.
En el mismo encuentro, el abridor derecho Michael Nix, en estado gripal desde la final en Puerto Rico, ponchó a cuatro y aguantó en dos anotaciones durante cinco innings a la poderosa artillería dominicana. Por los derrotados, el cubano Donell Linares falló dos veces, con una base por bolas y un pelotazo y descendió a .214.
A segunda hora, cuatro serpentineros de los Yaquis de Obregón lograron la lechada de México, 2-0 sobre los venezolanos Navegantes del Magallanes; un error en la primera entrada, seguido por bambinazo del jugador de campo corto Alfredo Amézaga decidieron el choque.
El cubano Cañizares fue esta vez a la banca de México (2-2), y su puesto de bateador designado lo ocupó el zurdo Karim García, dominado en tres ocasiones y ahora con promedio de .182. Venezuela suma igualmente 2-2, con dos fechas por delante en el round robin.
Hoy juegan Puerto Rico-Venezuela y República Dominicana-México. Mañana lo harán República Dominicana-Venezuela y México-Puerto Rico; los dos mejores en la tabla de posiciones decidirán el cetro en un programa adicional, un sistema nunca antes utilizado en las Series del Caribe.
En 2012, en su patio, Leones del Escogido se coronó cuando exhibía récord de 4-0; entonces los fanáticos dominicanos se fueron a festejar fuera del estadio, que sufrió una brusca caída en la venta de boletos de entrada.
