Darryl Jones y Bernard Fowler, miembros de los míticos Rollings Stones, se encuentran en La Habana para ofrecer dos conciertos con la banda The Dead Daisies, un banquete musical para los amantes del rock en Cuba, informaron los músicos a la prensa local.
"Estoy honrado y muy emocionado por visitar Cuba. Amo la música y la cultura cubana, así que tengo ganas de experimentar todas estas cosas en abundancias", dijo al diario Granma el bajista Jones, un estadounidense de 53 años, quien toca son los Stones desde 1993.
Jones, quien ha colaborado también con jazzistas como Herbie Hancock, Miles Davis, Mike Stern y Steps Ahead, dijo estar muy interesado en la música cubana de origen africano. "Siempre me han interesado las tradiciones que comienzan en el oeste de África y continúan a través del Caribe, sur, centro y América del Norte. Los músicos cubanos han jugado un papel muy valioso en el mantenimiento de esta vibrante cultura. Por eso esperamos sumergirnos en esta música durante nuestra visita a Cuba", añadió.
Desde el 2012 alterna sus compromisos entre los Stones y The Dead Daisies. "La programación de los Stones deja mucho tiempo para hacer otros proyectos. De ahí que varios de sus músicos estemos involucrados en nuestros propios grupos". "Con la visita a Cuba yo estoy viviendo un sueño como el resto de los músicos y por tanto, viajar a Cuba dos veces en un año sería fenomenal. Estoy listo para venir con los Stones cuando sea", afirmó su compatriota Fowler, un vocalista y compositor de 56 años.
El resto de la banda que tocará en Cuba la integran Jon Stevens, Richard Fortus y Dizzy Reed, Marco Mendoza, Brian Tich, John Corabi y David Lowy. The Dead Daisies se presentará el miércoles en el Maxim Rock, meca del rock en Cuba, y el sábado en el Salón Rosado de la Tropical.
El rock estuvo marginado durante décadas en la isla caribeña por motivos ideológicos, por ser considerada música proveniente de Estados Unidos. Aunque no posee mucho arraigo en la isla, sus miles de seguidores y promotores han logrado poco a poco abrirse espacios en la última década, logrando presentaciones públicas y difusión en la televisión y la radio, así como la entrega del teatro Maxim Rock como lugar exclusivo para las bandas locales del género.