La propuesta del régimen de La Habana de permitir que los cubanos residentes en el exterior participen en los debates del proyecto de Constitución, ha desatado una avalancha de críticas en la comunidad exiliada de Miami.
Para Orlando Gutiérrez Boronat, líder de la Asamblea de la Resistencia Cubana (ARC), la invitación recuerda la “artimaña” de los llamados encuentros de la Nación y la Emigración, convocados por el gobierno cubano en los años 90.
“El régimen está buscando simplemente formas de dividir este exilio, nutrirse de sus recursos y aparentar que hay algún tipo de participación política”, afirmó Gutiérrez Boronat. “Este es un documento excluyente, un documento sectario y partidista que no se basa en los derechos del pueblo sino en los poderes del Estado”.
Antes del anuncio, miembros de la oposición cubana dentro y fuera de Cuba habían presentado en un código de derechos y libertades con el que buscan la "alfabetización cívica" de los ciudadanos de la isla ante el proceso de reforma constitucional, que califican de ilegítimo.
El gobierno cubano anunció el pasado viernes que abrirá el debate sobre la reforma constitucional a los ciudadanos nacionales residentes en el extranjero. El anuncio fue hecho por Ernesto Soberón, director de Asuntos Consulares y de Cubanos Residentes en el Exterior del MINREX, quien presentó la propuesta como una idea “inédita en la historia de la revolución”.
El funcionario dijo que los residentes en el exterior podrán hacer sus propuestas a través de una página en internet en una planilla que estará habilitada desde septiembre, pero no aclaró si en el proceso podrán participar todos los cubanos que salieron definitivamente del país.
Sin embargo, el Partido Demócrata Cristiano de Cuba (PDCC), con sede en Miami, reaccionó aceptando la propuesta.
"Vamos a participar, aunque aclaramos que tenemos muchos desacuerdos con el proceso seguido e incertidumbres sobre su futuro, además discrepamos de manera contundente con cuestiones de fondo, como el no permitir el pluripartidismo, su visión limitada de los derechos humanos y la permanencia de la pena de muerte", expresó en PDCC en un comunicado.
Las reacciones no se han hecho esperar.
“No tengo ninguna opinión negativa sobre las personas que hayan decidido aprovechar la oportunidad para expresar sus opiniones, pero resulta muy irónico, después que todo ha sido conformado bajo secreto militar, inviten ahora a la gente de afuera que quiera puede opinar sobre un hecho consumado, porque eventualmente todos sabemos cómo se van a manejar las opiniones, tanto las de adentro como las de afuera”, manifestó Juan Antonio Blanco, director de la Fundación de Derechos Humanos de Cuba (FDHC).
La convocatoria incluiría a los casi dos millones de cubanos residentes fuera de la isla. El proyecto constitucionalmantiene como irrevocables el socialismo y el papel rector del Partido Comunista en la sociedad y el Estado, dos condiciones por las que la mayoría de los exiliados tuvieron que abandonar el país.
El proyecto de Constitución,aprobado en la Asamblea Nacional del Poder Popular a fines de julio, será sometido a una consulta dentro de la isla entre el 13 de agosto y el 15 de noviembre. El comienzo de la consulta coincide con la fecha de nacimiento de Fidel Castro (1926-2016).
Lac propaganda oficial está dando amplio despliegue a las venideras discusiones en los medios estatales. Además de la venta de 600 mil ejemplares del anteproyecto constitucional, el documento puede consultarse a través de internet.
El gobierno ha previsto más de 135 mil reuniones de consulta en centros de trabajo y estudio, en la comunidad y en el exterior.
(A partir de entrevistas realizadas por Yolanda Huerga).