Hoy es el 25º aniversario del Día Mundial de la Libertad de Prensa.
Los periodistas arrojan luz sobre muchos temas en todo el mundo; mantienen informados a los ciudadanos, lo que provoca debates y discusiones robustas, y hacen que los gobiernos rindan cuentas.
Honramos a los muchos periodistas y profesionales de los medios de comunicación que han dedicado sus vidas a su profesión. Vemos con demasiada frecuencia que los periodistas continúan tomando grandes riesgos para realizar este importante trabajo.
Han detenido a periodistas por informar en Birmania, Cuba, Egipto y Turquía, y en China, miembros de las familias de los periodistas uigures han sido detenidos como consecuencia de los reportajes de sus familiares sobre la represión generalizada por parte de China contra los uigures y otros musulmanes.
Las autoridades han cerrado o intentaron cerrar los medios de comunicación críticos de los respectivos gobiernos en Tanzania, en Camboya y las Filipinas, así como en muchos otros lugares. A mediados de abril, el gobierno nicaragüense ordenó el cierre de cinco canales de televisión durante las protestas a nivel nacional, y muchos periodistas siguen siendo amenazados, censurados o intimidados.
Instamos a la rendición de cuentas por el asesinato de periodistas en Malta, México, Rusia y Eslovaquia, y el aparente asesinato de un periodista de la BBC Pashto en Afganistán el lunes. También estamos indignados por el salvaje ataque suicida del lunes en Kabul reivindicado por ISIS que causó la muerte a nueve periodistas y profesionales de los medios de comunicación. Queremos expresar nuestras más profundas condolencias y pesar por la valentía de esos periodistas.
Si bien estos ejemplos demuestran claramente que la seguridad y la independencia de los periodistas y los medios de comunicación siguen siendo precarias en muchos entornos, también quisiéramos subrayar la importancia vital de la cobertura informativa creíble para las sociedades democráticas libres y abiertas.
La censura y la desinformación son tácticas comunes para erosionar la libertad de prensa, y alentamos a las personas en todas las regiones del mundo a pensar en forma crítica sobre sus fuentes de noticias e información.
A primera hora de esta mañana, el Departamento de Estado organizó una charla interactiva a través de Internet para analizar la importancia de la alfabetización mediática en el cambiante ambiente actual de noticias e información. Los debates públicos robustos y saludables basados en hechos, evidencia y razón son parte integral del compromiso cívico.
Con la participación en cámara de un grupo de espectadores en Nairobi y casi otros 30 grupos de espectadores en distintos lugares en todo el mundo, los panelistas destacaron las formas en que los educadores y estudiantes pueden desarrollar sus habilidades para analizar y comprender la credibilidad y los prejuicios de las fuentes mediáticas.