Presas políticas cubanas enfrentan falta de medicamentos y una pésima alimentación en las cárceles de la isla, según han comprobado sus familiares en visitas recientes a prisión, aseguran en testimonios ofrecidos a Radio Martí.
En la Prisión de Mujeres de Occidente, en el Guatao, se encuentra la Dama de Blanco Aymara Nieto Muñoz, quien cumplió en mayo de 2022 cuatro años de prisión y ahora cumple una nueva sanción, impuesta durante su encarcelamiento.
Su esposo, el opositor Ismael Boris Reñí, la visitó recientemente y desde La Habana señaló que la activista está presentando problemas de salud.
“El problema de la presión y el problema de sacrolumbalgia, y ahora le cayó un catarro. Ha pedido atención médica allí, pero medicamentos no hay”, explicó Reñí.
En Matanzas, en la prisión La Bellotex, cumple seis años de cárcel Tania Echevarría. Su hermana Dilayda Echevarría, afirma que en el penal no tienen medicamentos para la hipertensión que padece en estos momentos.
“Yo tuve que llevarle el medicamento de bajarle la presión a mi hermana porque ellos no tienen medicamentos allá dentro y la comida está super pésima”, dijo Echevarría.
También en La Bellotex se encuentra encarcelada Sissi Abascal, de 25 años, la más joven de las Damas de Blanco. Su madre, la activista Annia Zamora, explicó a Radio Martí que en el penal el agua está contaminada y las reclusas no pueden tomarla.
“No pueden tomarla y, entonces, para evitar parásitos, nosotros, los familiares, llevamos el agua de tomar”, relató Zamora.
Encarceladas y enfrentando similares condiciones, según han denunciado sus familiares, se encuentran las hermanas y prisioneras políticas Angélica y María Cristina Garrido, la Dama de Blanco Saylí Navarro y Lizandra Góngora, recientemente trasladada a una cárcel en la Isla de la Juventud, distante de su esposo e hijos, quienes residen en la provincia Mayabeque.
Foro