“La subcomisión de Derechos Humanos del Parlamento Europeo ha emitido un comunicado muy duro contra el gobierno cubano y la represión artística y cultural”, declaró Javier Larrondo, presidente de Cuban Prisoners Defenders, una organización con sede en Madrid.
Están preocupados por “la situación de los miembros del Movimiento San Isidro (MSI), como por la de Denis Solís González y la persecución que tienen artistas, poetas, académicos, activistas, personas LGTBI y periodistas independientes”, dijo Larrondo el jueves, varias horas antes del operativo policial en la sede del MSI.
La subcomisión argumenta que “no pueden ser criminalizados por ejercer pacíficamente su derecho a protestar”, explicó Larrondo.
También subrayó que “Es de mayor relevancia si tenemos en cuenta que este subcomité está presidido por el Grupo Socialista Europeo. Es de vital importancia el impacto sobre Europa y sobre Cuba; evidentemente, la presión que puede ejercer el Grupo Socialista sobre los dirigentes del régimen es muy superior que la que pueden realizar otros partidos y por lo tanto estamos enhorabuena con que este partido haya dado este paso”, concluyó Larrondo.
En La Habana, el opositor Manuel Cuesta Morúa, promotor de la Propuesta 2020, elogió la posición del órgano europeo:
“Es fundamental en tres sentidos: el primero, que se solidariza con un momento de urgencia de derechos humanos en Cuba; segundo, viene desde el Parlamento Europeo, ya que se ha sentido la ausencia de Europa sistemática, pública sobre todo, en materia de derechos humanos y libertades fundamentales en Cuba; y tercero y más importante, es que defiende, más allá de un movimiento, un derecho, el derecho a la protesta pacífica, por cierto, reconocida en la Constitución cubana en su artículo 56”, afirmó el activista político cubano.
María Arena, quien dirige la mencionada subcomisión de Derechos Humanos, advirtió que “la libertad de expresión artística es un derecho fundamental. Limitar este derecho no solo manda un mensaje negativo a la ciudadanía, sino también fuera del país” y añadió:
“Aliento encarecidamente a las autoridades cubanas a entablar un diálogo urgente para aliviar la situación, liberar a Denis Solís González y abstenerse de intimidar al Movimiento San Isidro y cualquier protesta pacífica”.
