Pánfilo, el personaje principal del programa humorístico de la televisión cubana, está de moda en los medios de prensa de Cuba desde hace varias semanas.
El reconocimiento ganado por Pánfilo en el espacio Vivir del Cuento, que cada lunes transmite la televisión en la isla, se ha visto reforzado por las dos ocasiones en las que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, compartió el mismo escenario en el contexto de su visita a Cuba.
Este martes, Pánfilo ganó titulares en el periódico Guerrillero, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba en la provincia de Pinar del Río, en un artículo titulado "Pánfilo, el Liborio contemporáneo", escrito por Ramón Brizuela Roque.
Brizuela comienza su comparación explicándole a los contemporáneos quién fue Liborio, personaje de la sátira política de la Cuba precomunista, que salió de los escenarios cuando la revolución subió al poder en 1959.
En su explicación comparativa, Brizuela se limita a señalar que Liborio era "el guajiro inteligente, apabullado por los políticos, pero no humillado, y con una filosofía muy criolla que sentaba cátedra en las tertulias".
"Hoy Pánfilo es también personaje de tertulias, sagaz de pensamiento, sarcástico, pero comedido y consecuente, que lucha para que la humildad sea un mérito y no una mácula, desde su sobriedad económica da lecciones moralizantes", afirma el articulista.
Brizuela se muestra partidario del humor de Pánfilo y señala que a muchos no les simpatiza porque "consideran que algunas de sus ironías son políticamente irreverentes".
"No hay individuos de nuestra sociedad ajenos a lo que nos enseñan cada lunes, todos somos Pánfilos en la bodega, la farmacia, en el círculo de abuelos, en la escuela, el centro de producción y en la casa, nos reímos con la cosas de Pánfilo y olvidamos nuestras reacciones diarias que nos hacen como él", afirma.
Se refiere a los altos precios de los artículos de consumo, uno de los temas recurrentes de Pánfilo, y critica a quienes culpan a los carretilleros de esa "estresante" escalada "como si ellos fueran los Jinetes del Apocalipsis, causantes de todos los males".
"Liborio tuvo su época, Pánfilo tiene la suya y estos individuos históricos tienen una misión mayor que hacer reír, también son para pensar. Quizás muchos no compartan mi criterio, pero también es buena la diversidad de pensamiento", concluyó.