Militares colombianos sorprendieron en la madrugada del miércoles a 22 emigrantes cubanos –10 mujeres y 12 hombres– a bordo de una lancha en el golfo de Urabá, cercano a Panamá, cuando intentaban llegar al país istmeño.
El contraalmirante Ricardo Hurtado, comandante de la Fuerza de Tarea Neptuno que llevó a cabo la operación, agregó que en el procedimiento fueron capturados los dos hombres que conducían la lancha, en las inmediaciones del corregimiento Triganá, de Acandí, departamento de Chocó.
El diario El Tiempo, en un reciente reportaje sobre el tema, informó sobre la desarticulación de una banda de contrabandistas de personas que estaba cobrando a los cubanos unos $600 por cabeza por ayudarlos a atravesar el país de Ecuador a Panamá.
Hurtado informó que estas personas, una vez que son atendidas por personal médico de la Armada en Urabá y de los hospitales de las respectivas poblaciones, se dejan a disposición de Migración Colombia en la ciudad de Turbo, departamento de Antioquia.
Allí los funcionarios de esta dependencia les brindan atención humanitaria, por lo general los tienen que hidratar y alimentar debido a las numerosas horas que pasan sin comer ni beber agua potable, y analizan su situación migratoria para determinar si los deportan a sus países de origen o les conceden un permiso de cinco días de tránsito por el país para que regresen a la frontera por la que entraron, por lo general la de Ecuador.
Los dos colombianos que tripulaban la lancha fueron entregados a la Policía, que los deja a disposición de la Fiscalía para que inicie la investigación que corresponde.
Del 1 de enero al 30 de septiembre del año en curso, la Armada, la Policía y el Ejército de Colombia han interceptado en el golfo de Urabá a 1.833 migrantes, en su mayoría cubanos.