En la noche del jueves al viernes, Estados Unidos lanzó 59 misiles de crucero Tomahawk contra una base aérea del centro de Siria, desde dos navíos estadounidenses en el Mediterráneo.
Los misiles fueron lanzados en particular contra la base e aérea de Shayrat,
desde los navíos de guerra USS Porter y USS Ross.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llamó el jueves a "todos los países civilizados" a trabajar juntos para poner fin al derramamiento de sangre en Siria, tras bombardear posiciones del régimen sirio en respuesta al supuesto ataque químico.
"El martes, el dictador sirio Bashar al Asad lanzó un horrible ataque con armas químicas contra civiles inocentes usando un agente neurológico mortal", declaró Trump en una comparecencia televisiva desde su residencia de Mar-a-Lago, en Florida.
Trump informó a sus compatriotas que había ordenado "un ataque militar puntual contra la base aérea en Siria desde donde había sido lanzado el ataque con arma química. Es vital para la seguridad nacional prevenir y contener la diseminación y uso de armas químicas letales".
Por eso, pidió "a todos los países civilizados que se unan a nosotros para buscar el fin del derramamiento de sangre en Siria y también para poner fin al terrorismo de todo tipo".
"Esperamos que mientras Estados Unidos defiende la justicia, la paz y la armonía prevalecerán al final", agregó.
En la visión del mandatario estadounidense, Asad "arrancó la vida de hombres, mujeres y niños indefensos".
De acuerdo con fuentes oficiales, por lo menos 59 misiles Tomahawk fueron lanzados, en particular contra la base de aérea de Shayrat.
Los misiles fueron lanzados desde los navíos de guerra USS Porter y USS Ross, que este jueves se encontraban en aguas en el Este del mar Mediterráneo.
El secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, había sido más explícito al prometer una "respuesta apropiada" al ataque del martes a la aldea de Jan Sheijun, en la provincia rebelde de Idlib. Entre las víctimas mortales hay 27 niños.
Tillerson evocó asimismo "un proceso político que conduzca a la salida de Asad".
"El papel de Asad en el futuro (de Siria) es incierto con los actos que cometió", precisó.
Reino Unido, Francia y Estados Unidos presionaron para llevar a cabo el jueves una votación para pedir una investigación del ataque químico, pero decidieron posponerla.
Radares y sistemas de vigilancia estadounidenses detectaron un avión sirio que dejaba caer bombas cerca de un hospital en el área de Jan Sheijun, provincia de Idlib. Poco después se empezaron a conocer las imágenes de las víctimas del ataque químico.
La reacción de Rusia
Rusia advirtió hoy a Estados Unidos de las "consecuencias negativas" que tendría una acción militar en Siria en respuesta al ataque químico de esta semana, del que Washington responsabiliza al régimen de Bachar al Asad.
"Hay que pensar en las consecuencias negativas. Toda la responsabilidad, si hay una acción militar, estará sobre los hombros de aquellos que la inicien", dijo a los periodistas el embajador ruso ante la ONU, Vladimir Safronkov.
Preguntado por cuáles serían esas consecuencias, el diplomático apuntó a "la historia" y a los casos de Irak o Libia, donde EE.UU. utilizó la fuerza.
El presidente ruso, Vladímir Putin, convocó hoy a su Consejo de Seguridad para analizar el ataque de Estados Unidos contra una base aérea en Siria, acción militar calificada por el Kremlin de "agresión contra un aliado de Rusia".
"Ya se puede decir que la reunión se centrará en los ataques con misiles perpetrados esta madrugada por EEUU contra Siria", dijo a los periodistas el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Denunció que el ataque lanzado en represalia por el presunto uso de armas químicas contra civiles solo beneficia a las organizaciones yihadistas que actúan en territorio sirio.
"No sabemos qué objetivos se propuso Washington al tomar la decisión sobre esos ataques. Pero es un hecho indiscutible que los ataques se han realizado en beneficio del Estado Islámico (EI), el Frente al Nusra y otras organizaciones terroristas", subrayó.
Las fuerzas armadas rusas, agregó, seguirán prestando apoyo al Ejército del régimen sirio "para ayudarles en su lucha con los terroristas".
Peskov recordó que durante su campaña electoral, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, "declaró la lucha contra el terrorismo internacional y el EI como su prioridad y defendió la formación de una coalición internacional en toda regla".
"Lo que ha sucedido es todo lo contrario. Veremos cómo se desarrolla la situación, pero ya podemos decir que esos ataques han perjudicado la lucha contra el terrorismo", apuntó.
Mientras, el Ministerio de Defensa ruso informó de que en el ataque contra la base aérea siria de Shayrat murieron cuatro militares sirios y desaparecieron otros dos.
Además, según datos de la cartera rusa, menos de la mitad de los 59 misiles lanzados por la Armada estadounidense alcanzaron su objetivo.