El desplazamiento de dos buques de la armada iraní por el Atlántico mantiene al Pentágono en operación de vigilancia, por la presunción de funcionarios de inteligencia de que el destino final sería Venezuela, informó la Voz de América, VOA.
Tanto la dirección como el contenido del cargamento de los barcos es desconocido, pero funcionarios de inteligencia consultados por Político y CNN han alertado sobre la posibilidad de que Irán planea despachar armamento al hemisferio occidental.
El Departamento de Defensa de Estados Unidos consideraría la entrega de armas como un “acto de provocación” y una “amenaza” para el hemisferio, indicó el portavoz del Pentágono a CNN.
“En tal caso, nos reservamos el derecho de tomar las medidas apropiadas […] para disuadir la entrega o el tránsito de tales armas”, dijo John Kirby.
El asesor de asuntos hemisféricos de la Casa Blanca, Juan González, expresó a la VOA que “lo que estaría haciendo Venezuela es desestabilizando aún más la región”, pero se reservó los comentarios sobre asuntos de inteligencia.
“Comprar armamento, en general, no le pone comida en la mesa a los venezolanos”, destacó González.
Durante el primer trimestre de 2021, el Gobierno de Nicolás Maduro recibió al menos tres buques de bandera iraní con cargamento de gasolina; la Administración Biden no tomó ninguna medida de aplicación de sanciones aparente.
El senador republicano Marco Rubio, que apoya la línea de mano dura contra los Gobiernos de Irán y Venezuela, expresó que los actuales buques en tránsito “tienen toda la pinta” de contener armamento. Rubio lo asoció como una “oportunidad de proyectar un mensaje de fuerza [de Irán] a la Administración de Biden”.
González resaltó que la seguridad regional es del interés de Estados Unidos, pero advirtió que "debe ser la decisión de estos países [socios] de decidir qué está en sus intereses. Yo no veo a Irán como una influencia positiva en ninguna forma”.
Bajo la Administración Trump se impusieron sanciones a marineros iraníes por hacer negocios con el Gobierno de Nicolás Maduro. El presidente venezolano ha defendido el derecho de su país “a comprar en el mundo lo que quiera comprar" y repudiado las sanciones de Washington.
González apunta que “[en] lo que debemos enfocarnos [es] en crear un sistema democrático para que las personas decidan su futuro […] y pensar menos sobre buques iraníes”.
La Casa Blanca apoya un proceso de negociación entre el Gobierno de Maduro y la oposición venezolana que, de acuerdo a declaraciones recientes de González, “debe ser seria, concreta, irreversible y limitada por el tiempo”.
El asesor del presidente Biden recalcó a la VOA sobre la necesidad de un “tiempo limitado”, pero descartó comentar cuánto.
“Lo que podemos hacer como una comunidad internacional es identificar qué pasos concretos se deben tomar para que la comunidad internacional responda levantando la presión o haciendo algo para recompensar o premiar esas decisiones concretas”, dijo el funcionario.
El Gobierno de Maduro propuso que los diálogos sean “un acto público” y fustigó la “presión” estadounidense.
“Como decimos en Colombia, los dos lados van a tener que tragar sapos por el bien del país”, remató González.