A diferencia del uso restringido que pueden hacer de Internet los cubanos, en Estados Unidos su acceso no sólo es libre para todos sino que ahora además las autoridades planean una red inalámbrica para ofrecer el servicio gratuito.
De acuerdo con una propuesta de la Comisión Federal de Comunicaciones estadounidense (FCC, por sus siglas en inglés), que cuenta con el respaldo de firmas de gran peso en la red como Google y Microsoft, existe el propósito de crear una red de servicio Wifi abierta al público.
El plan cuenta, como era de esperar, con la oposición de las compañías actualmente proveedoras del servicio de conexión que obtienen jugosos ingresos por el cobro de acceso a la web.
Pero la FCC ya empezó a liberar una porción del espectro de bandas de frecuencia, y de acuerdo con el proyecto las estaciones locales de televisión venderían al gobierno parte de las que poseen para ser utilizadas en la red pública.
Como las frecuencias que el gobierno quiere liberar son más potentes que las ofrecidas por las redes inalámbricas comerciales ello permitirá que Internet sea accesible en zonas donde hoy en día no les resulta rentable dar el servicio a los proveedores privados, o donde es muy caro pagarlos.
Según el presidente de la FCC, Julius Genachowski, otra ventaja adicional es que “el espectro libre ha demostrado que favorece la innovación tecnológica, la inversión y el crecimiento económico y da grandes beneficios para los consumidores”.
De ser aprobada por el Congreso, la red inalámbrica nacional gratuita tardaría varios años en llegar a ser totalmente operativa.
De acuerdo con una propuesta de la Comisión Federal de Comunicaciones estadounidense (FCC, por sus siglas en inglés), que cuenta con el respaldo de firmas de gran peso en la red como Google y Microsoft, existe el propósito de crear una red de servicio Wifi abierta al público.
El plan cuenta, como era de esperar, con la oposición de las compañías actualmente proveedoras del servicio de conexión que obtienen jugosos ingresos por el cobro de acceso a la web.
Pero la FCC ya empezó a liberar una porción del espectro de bandas de frecuencia, y de acuerdo con el proyecto las estaciones locales de televisión venderían al gobierno parte de las que poseen para ser utilizadas en la red pública.
Como las frecuencias que el gobierno quiere liberar son más potentes que las ofrecidas por las redes inalámbricas comerciales ello permitirá que Internet sea accesible en zonas donde hoy en día no les resulta rentable dar el servicio a los proveedores privados, o donde es muy caro pagarlos.
Según el presidente de la FCC, Julius Genachowski, otra ventaja adicional es que “el espectro libre ha demostrado que favorece la innovación tecnológica, la inversión y el crecimiento económico y da grandes beneficios para los consumidores”.
De ser aprobada por el Congreso, la red inalámbrica nacional gratuita tardaría varios años en llegar a ser totalmente operativa.