A continuación, un editorial que refleja la opinión del gobierno de Estados Unidos:
En los últimos meses, ciudadanos de a pie en todo el mundo han salido a las calles para protestar pacíficamente contra la opresión y ahora muchos de ellos están pagando un alto precio.
En vísperas del Día Internacional de los Derechos Humanos el 10 de diciembre, el presidente Joe Biden destacó la difícil situación de estos valientes manifestantes en este continente.
“Pido una vez más la liberación de los cientos de presos políticos en Cuba que permanecen detenidos tras las protestas del 11 de julio de 2021”, dijo en un comunicado.
“Frente a la opresión, estos manifestantes ejercieron con valentía sus libertades fundamentales, incluidos los derechos a la libertad de expresión y reunión pacífica”, declaró.
Decenas de miles de cubanos salieron a las calles ese día de julio en números sin precedente, manifestándose contra el gobierno por la escasez de medicamentos, combustibles y alimentos, así como décadas de represión a sus derechos humanos.
Muchos corearon "¡Libertad!" y "¡Patria y vida!". Sus gritos y preocupaciones fueron respondidos con violencia y represión brutales y sistemáticas.
Como afirma el informe de derechos humanos más reciente del Departamento de Estado de EEUU sobre Cuba, "las fuerzas de seguridad respondieron con gases lacrimógenos, palizas y arrestos".
Miles de personas fueron arrestadas, incluidos destacados activistas de derechos humanos, artistas y líderes religiosos.
“Muchos de los arrestados denunciaron tratos crueles y degradantes en prisión”, señaló el Departamento de Estado.
“El gobierno llevó a cabo juicios sumarios para algunos manifestantes; buscó largas sentencias de prisión, algunas de hasta 30 años, en cientos de casos; y mantuvo a otros manifestantes en detención preventiva prolongada”, indicó el informe.
Algunos activistas optaron por exiliarse y el gobierno obligó a otros a hacerlo.
Hasta la fecha, cientos de manifestantes pacíficos detenidos el 11 de julio y las semanas posteriores permanecen en prisión.
Desde las protestas, el gobierno de Biden-Harris ha impuesto sanciones a decenas de funcionarios cubanos, así como a fuerzas especiales cómplices de la represión de los manifestantes y otros disidentes.
EEUU sigue apoyando al pueblo de Cuba que exige el respeto a sus derechos y el derecho de participar en el futuro de la nación, dijo Biden. "Seguiremos abogando por la liberación de todos los que fueron encarcelados en esta brutal represión y continuaremos responsabilizando a los funcionarios cubanos por la violencia contra las protestas pacíficas", declaró Biden.