La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha ubicado a Cuba entre los países de tasas semanales de muertes por COVID-19 más altas del mundo.
Al respecto, el biólogo y activista cubano Oscar Casanella dijo a Radio Martí que “se han empezado a aplicar los ingresos domiciliarios porque no hay capacidad, están desbordados los hospitales".
“Además”, señaló Casanella, “hay muchas personas que están ya graves en los centros de aislamiento, solicitan un traslado a un hospital que tenga una unidad de cuidados intensivos y no hay siquiera transporte”.
“Esto se esperaba que ocurriera”, afirmó el biólogo, “porque, desde antes de la epidemia de COVID-19 en Cuba, ya el sistema sanitario estaba en crisis por las condiciones de higiene, por la falta de medicamentos y de infraestructura, la falta de ambulancias, por ejemplo”.
Junto a Cuba, se ubican en la lista de la OPS Argentina, Colombia, Ecuador y Paraguay.
La OPS también dio a conocer que en Estados Unidos los casos se han duplicado durante la última semana, mayormente, entre personas no vacunadas.
Karitza Etienne, directora de la Organización Panamericana de la Salud, señaló que Cuba está registrando sus tasas de infección y muerte más altas que en cualquier otro momento de la pandemia y agregó que más de siete mil menores y casi cuatrocientas mujeres embarazadas dieron positivo en la última semana.
Según el biólogo Casanella es lamentable que esté aumentando en la isla la incidencia de la enfermedad en edades tempranas.
“Quizás estén más aislados en las casas pero, cuando se reúnen con otros niños de la familia o con el del vecino, es más difícil que ellos se autocontrolen y mantengan la distancia física”.
“Ahí hay una suma de factores”, explicó el científico cubano. “Está por supuesto el incremento de la cepa Delta, del SARCO2, está el estado nutricional de los cubanos; para que una persona inmunocompetente, se necesita un buen estado de nutrición en cuanto a calidad”.