El Departamento del Tesoro impuso hoy sanciones a una red de transporte marítimo y varios representantes en China y Dubái de la compañía aérea Mahan Air por el envío de armas de Irán a Yemen y Siria, dentro de su campaña de presión al gobierno de Teherán.
"El régimen iraní usa sus industrias marítimas y de aviación para suministrar armas a sus grupos terroristas regionales, contribuyendo de manera directa a la devastadora crisis humanitaria en Siria y Yemen", dijo Steven Mnuchin, secretario del Tesoro, en un comunicado.
"Los sectores de aviación y transporte marítimo deberían estar vigilantes y no permitir que sean utilizados por terroristas", agregó.
En concreto, el Tesoro designó varias compañías controladas por el empresario iraní Abdolhossein Khedri (Khedri Jahan Darya Co. and Maritime Silk Road LLC) que habrían participado en el contrabando de armas del Cuerpo de Guardia Revolucionaria Islámica.
Asimismo, son objeto de sanciones tres representantes generales de ventas de la compañía aérea iraní Mahan Air: Gatewick LLC y Jahan Destination Travel and Tourism LLC, con sede en Dubái; y Gomei Air Services Co., con oficinas en Hong Kong y las ciudades chinas de Shenzhen y Guangzhou.
Como consecuencia de la designación del Tesoro, quedan congelados los activos que estas entidades y empresas puedan tener bajo jurisdicción estadounidense y se les prohíbe hacer transacciones financieras con ciudadanos estadounidenses.
Las sanciones se producen apenas unos días después de que Washington y Teherán acordasen un intercambio de presos, en un momento de gran tensión entre ambas partes tras la retirada unilateral de Washington del acuerdo nuclear internacional de 2015.
El pasado sábado, en un intercambio de detenidos, fueron liberados el científico iraní Masud Soleimaní, acusado el año pasado en EE.UU. de intentar exportar material biológico a Irán, y el investigador estadounidense Xiyue Wang, arrestado en 2016 en el país persa y condenado por espionaje.
A pesar de las tensiones, el presidente, Donald Trump, ha reiterado en varias ocasiones su disposición a negociar con la República Islámica y, de hecho, intentó sin éxito reunirse con su homólogo iraní, Hasán Rohaní, en Nueva York en septiembre, en los márgenes de la Asamblea General de la ONU.