El secretario de Estado norteamericano Antony Blinken presentó los elementos de una estrategia de seguridad nacional que coloca a China en el centro de los desafíos globales que enfrenta Estados Unidos.
Blinken señaló el miércoles la relación de Washington con Beijing como el principal foco de la administración del presidente Joe Biden en el exterior y dijo que el país plantea "la mayor prueba geopolítica" de este siglo.
“China es el único país con el poder económico, diplomático, militar y tecnológico para desafiar seriamente al sistema internacional estable y abierto - todas las reglas, valores y relaciones que hacen que el mundo funcione como queremos", dijo el Secretario de Estado en un discurso en el Departamento de Estado.
Blinken buscó establecer cómo la política exterior traerá beneficios para los trabajadores y las familias estadounidenses, y dijo que eso era clave para el enfoque de la nueva administración, que tendrá una estrategia que ve poca distinción entre política exterior y la interna.
China fue la única nación que Blinken mencionó entre las ocho prioridades para EEUU, que también incluían trabajar para evitar otra pandemia global, abordar el cambio climático y promover la democracia en el extranjero.
Las dos naciones más poderosas del mundo están en desacuerdo por la influencia en la región del Indo-Pacífico, las prácticas económicas de Beijing, la situación en Hong Kong y Taiwán y los derechos humanos en la región china de Xinjiang.
El presidente Biden ha calificado a Beijing como el "competidor más serio" de Estados Unidos y su administración ha indicado que continuará en general con el enfoque duro hacia China adoptado por el expresidente Donald Trump.
Según Blinken, los otros objetivos importantes de política exterior de la administración Biden incluyen construir una economía global más inclusive, abordar la creciente amenaza global contra la democracia, reparar las relaciones con los aliados y mantener el liderazgo en tecnología.
