El comportamiento de varios estudiantes de Medicina sudafricanos en Cuba ha sido cuestionado después de que las autoridades locales emitieran una queja por sus frecuentes rezos y oraciones en el horario docente.
De acuerdo a la página IOL, los responsables de este programa de intercambio se mostraron "avergonzados" por el suceso.
La jefa del Departamento de Programas de Salud para jóvenes de Cuba, Mónica Jama, instó a estos estudiantes a ser "buenos embajadores" de su país y justificar los 246 millones de rans (más de $19 millones) que se invierten en este programa.
Por su parte, el miembro del consejo ejecutivo para la Salud de la región de KwaZulu-Natal, Sibongiseni Dhlomo, dijo también que aquellos que sean descubiertos "abusando de los recursos del gobierno" por orar en su tiempo de estudio serían enviados a casa para seguir viviendo en la pobreza. Este programa de estudios en Cuba para sudafricanos está dirigido a estudiantes de familias desfavorecidas y está financiado por el Gobierno.
Dhlomo llegó incluso a informar que el Gobierno cubano había emitido una queja por los estudiantes, a los que calificó de "molestia", al haber interrumpido el tráfico en la calle para rezar. En alusión a los responsables de este hecho se refirió a ellos en primera persona de esta manera: "Vamos a identificarte y a devolverte a Sudáfrica, y tendrás que devolverle el dinero al Gobierno".
El propio responsable de Salud sudafricano les replicó que "algunos de ustedes rezan en las calles. No se puede ir parando coches para orar por ellos... No se puede hacer eso. Los cubanos rezan, pero ellos prefieren hacerlo en sus casas". Según éste, cuando los estudiantes terminan sus clases a las 3:00 p.m. deben tomar un breve descanso para ir a las instalaciones deportivas o al gimnasio y están obligados a regresar a las 5:00-6:00 p.m. para la cena y estar dormidos a las 10:00 p.m.
Por ese motivo, Dhlomo manifestó que no se trataba de una cuestión de orar, sino de poner en peligro sus carreras médicas y respetar la cultura cubana. Les reprochó, además, que algunos de los estudiantes estaban importando tabacos cubanos para venderlos en Sudáfrica y que algunos de ellos también exigieron vivir en habitaciones individuales en vez de compartidas.
"Es vergonzoso", dijo, y les informó que el propio Ministro de Salud de Cuba se había quejado de que consumían alcohol y provocaban peleas.
En su defensa, según recoge IOL, una de estas estudiantes declaró que toda la polémica era debida a que "la religión no es común en Cuba y leyes cubanas son muy estrictas porque el alcohol está permitido mayoritariamente sólo para los turistas".