Human Rights Foundation (HRF), Directorio Democrático Cubano (DDC), el Centro para una Cuba Libre (CFC) y Young Leaders Group (YLG) coordinaron manifestarse el pasado 10 de julio de manera simultánea en las ciudades de Nueva York y Washington, DC, para recordar el 20 aniversario de la masacre del Remolcador 13 de Marzo, hundido el 13 de julio de 1994 por fuerzas del régimen de La Habana.
Unos se dieron cita frente a la Sede Permanente de Cuba ante la ONU en la ciudad de Nueva York y otros frente a la Sección de Intereses de Cuba en Washington, DC para realizar 20 minutos de silencio simbólicamente por los 20 años de impunidad que se cumplen de este terrible crimen.
“Estamos aquí para recordar que no debemos olvidar los crímenes de la dictadura castrista. Y que un crimen como este, aunque aun permanezca impune, debemos seguirlo denunciando hasta que los culpables sean llevados a la justicia internacional”, dijo Janisset Rivero, secretaria nacional adjunta del DDC, durante la actividad en Nueva York.
Javier El-Hage, director ejecutivo de la HRF dijo que: “Es una responsabilidad de todos los activistas de derechos humanos en el mundo no olvidar estos crímenes y luchar por que se conozcan y se busque justicia”, y luego comenzaron a leer los nombres de los asesinados.
Rosa María Payá, miembro del Movimiento Cristiano Liberación e hija del opositor asesinado Oswaldo Payá Sardiñas se sumó a la demostración realizada en Washington, DC.
“La impunidad de la que goza el gobierno cubano ha cobrado muchas vidas. Cada crimen del régimen contra un cubano es un crimen contra todos los cubanos. Despertemos a la solidaridad con las víctimas”.