Expresos políticos de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) exigen la liberación del líder opositor José Daniel Ferrer y de otros tres integrantes de la organización detenidos desde hace ya 45 días.
Una de ellos es Lizandra Rivera quien cumplió una condena de 2 años de cárcel bajo el cargo de atentado. Parte de este tiempo lo paso en celda de castigo en la prisión provincial de mujeres de máxima seguridad en Camagüey.
Ella pide la liberación inmediata de Ferrer y los otros 3 opositores porque, según dijo a Radio Martí, sabe lo que pasan en esas condiciones.
Ellos deben estar pasando por lo mismo, una situación pésima, afirma Rivera.
Otro integrante de UNPACU que ha conocido las cárceles del régimen cubano es Zaqueo Báez, su coordinador en la capital cubana.
Báez afirma que la estrategia de poner otro recluso en la cárcel de castigo es una práctica regular para torturar a los opositores encarcelados.
José Daniel Ferrer, coordinador general de UNPACU, y los otros tres activistas fueron detenidos el 1 de octubre durante un operativo dirigido por la Seguridad del Estado en la sede el grupo opositor, en Santiago de Cuba.
El pasado 7 de noviembre, su esposa e hijos lograron verlo en la prisión de Aguadores, en una visita de apenas cinco minutos en la que Ferrer narró muy de prisa todo lo que le ha acontecido. El opositor se desgarró el uniforme de prisión para mostrarle a su esposa las evidencias de torturas en su cuerpo.