Las organizaciones internacionales tampoco han registrado un aumento de la corrupción en Ucrania durante el año posterior al inicio de la invasión a gran escala por parte de Rusia. De este modo, según los cálculos de Transparencia Internacional, Ucrania recibió 33 puntos en la clasificación del Índice de Percepción de la Corrupción para 2022, lo que supone un punto más que el año anterior.
La revisión de estos mensajes ha mostrado que algunas declaraciones de Michael McCaul han sido interpretadas erróneamente y algunas hasta han sido inventadas.
El motivo de la difusión de desinformación fue la audiencia del Congreso de EEUU el 29 de marzo sobre mecanismos para la transparencia y la rendición de cuentas de la ayuda a Ucrania. En su discurso inicial, el presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, Michael McCaul, afirmó que “sólo el 20% de los fondos van directamente al gobierno ucraniano en forma de asistencia presupuestaria directa”. Fue esta declaración de McCaul la que fue distorsionada deliberadamente por algunos canales de Telegram prorrusos, que afirmaban que supuestamente sólo el 20% de la ayuda financiera a Ucrania llega al destinatario, y el resto es robado por las autoridades ucranianas.
La cita completa del discurso de McCaul suena de la siguiente manera: “De los 113 miles de millones de dólares, alrededor del 60% va dirigido a los militares estadounidenses, trabajadores estadounidenses y a la modernización de depósitos de EEUU. En realidad, tan solo el 20% de la financiación va directamente al gobierno ucraniano en forma de ayuda presupuestaria directa”.
Por tanto, se trata de que los paquetes de ayuda de EEUU incluyen la ayuda directa a Ucrania: ayuda económica, militar y presupuestaria al gobierno de Ucrania; ayuda con fines humanitarios en Ucrania y en los países que acogen a refugiados ucranianos, y el gasto de EEUU en apoyo de la democracia mundial tras el ataque no provocado de Rusia contra Ucrania. Esta categoría de gastos incluye la compensación del ejército de EEUU por las armas que transferirá a Ucrania; apoyo a las tropas estadounidenses estacionadas en Europa; medios para recibir a refugiados ucranianos en los Estados Unidos; financiación de la preparación para superar las consecuencias de posibles incidentes nucleares. Puede leer más sobre las diferentes categorías de financiación aquí.
No solo esta expresión de McCaul fue tergiversada. La declaración de que EEUU está registrando “múltiples hechos de corrupción y malversación” en Ucrania, el número de los cuales ha aumentado un 500% durante el último año, fue inventada y se contradice directamente con las conclusiones del Comité.
Durante las audiencias en el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, los inspectores generales del Departamento de Estado de EEUU, USAID (Agencia de EEUU para el Desarrollo Internacional, ed.) y del Departamento de Defensa de EEUU fueron entrevistados sobre los mecanismos de transparencia y rendición de cuentas de la ayuda de los Estados Unidos a Ucrania, quienes afirmaron por unanimidad “la ausencia de pruebas de que el apoyo a Ucrania no se utilizó según lo previsto”.
De este modo, contestando a la pregunta de un miembro de la Cámara de Representantes, Scott Perry, de si podría el gobierno proporcionar garantías de que el dinero destinado para Ucrania no se ha usado para fines no previstos, el inspector general del ministerio de Defensa, Robert Storch, contestó: “En base a nuestro trabajo, no hemos confirmado ningún caso de desviación”.
El presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, Michael McCaul, en su discurso inicial enfatizó que la realización de la supervisión consiste en garantizar que la ayuda “se utilice según lo previsto”, no en poner en duda la importancia de ayudar a Ucrania.
También en una sesión informativa el 30 de marzo, el asesor de seguridad de la administración presidencial de EEUU, John Kirby, declaró que EEUU “no ha visto ninguna prueba de que haya habido violaciones flagrantes en lo que respecta a la gestión de la asistencia de seguridad que se envió a Ucrania”.
Tampoco existen las declaraciones de funcionarios estadounidenses de que durante el último año la corrupción en Ucrania ha crecido un 500%. Esta información fue inventada por los propagandistas. Es más, las organizaciones internacionales tampoco han registrado un aumento de la corrupción en Ucrania durante el año de guerra. Así, según Transparencia Internacional, Ucrania ha obtenido 33 puntos en el ranking del Índice de percepción de la Corrupción en 2022 (ocupa el puesto 116 de 180 países analizados), que es el indicador más alto desde el lanzamiento de la metodología actualizada del Índice de Percepción de la Corrupción.
La propaganda del Kremlin difunde regularmente desinformación sobre Ucrania para socavar la confianza entre los aliados.