La selección francesa de fútbol conquistó el domingo el segundo titulo mundial de su historia al superar 4-2 a Croacia en un emotivo partido en el que aprovechó sus oportunidades en ataque para doblegar a un rival que lo complicó durante largos pasajes del encuentro.
Francia volvió a levantar la Copa del Mundo, algo que había logrado en 1998, ante un equipo croata que jugó su primera final. En tanto, Didier Deschamps se convirtió en el tercer hombre en ganar el trofeo como jugador y entrenador, sumándose al brasileño Mario Zagallo y al alemán Franz Beckenbauer.
"Esto es maravilloso. No jugamos un gran partido pero mostramos una gran fortaleza mental", dijo Deschamps tras el encuentro.
Croacia comenzó mejor en el estadio Luzhniki, presionando arriba para complicar la salida de Francia y con Mario Mandzukic complicando a la zaga gala. Francia mostró problemas para armar juego en los minutos iniciales del partido, en los que buscó a sus delanteros con pases largos al no poder construir desde el centro del campo.
Pese a estar más adelantada en el campo y tener mucho más la posesión del balón, Croacia tampoco podía crear peligro.
Y cuando pocos lo esperaban, Francia abrió el marcador gracias a un autogol en una jugada de balón parado, el arma mortal del elenco galo en este Mundial.
A los 18 minutos, un tiro libre de Antoine Griezmann desde la derecha fue cabeceado por Mandzukic, quien de forma involuntaria venció la estirada de su arquero para anotar el primer gol a propia puerta en la historia de las finales mundialistas.
La primera oportunidad clara para Croacia fue a los 23, con un remate de Ivan Rakitic desviado a pase de Mandzukic. Y el elenco balcánico lo empató a los 28 en otra jugada nacida en una pelota parada. Tras varios rebotes, Ivan Perisic definió con un zurdazo cruzado desde el borde del área para superar al meta Hugo Lloris.
A los 35, el árbitro argentino Néstor Pitana cobró penal por una mano de Perisic dentro del área tras revisar la jugada con el VAR. Griezmann ejecutó a los 37 y puso el 2-1 con un remate bajo al palo derecho del arquero, que se lanzó para el otro lado.
"Estoy muy feliz. Fue un partido muy difícil porque Croacia jugó un gran partido. Comenzamos con algunas dudas pero de apoco nos metimos en el partido y marcamos la diferencia de contraataque", sostuvo Griezmann.
El inicio del segundo tiempo mostró a los dos equipos intercambiando ataque por ataque, y tras varias jugadas de peligro Francia se puso 3-1.
A los 58, Paul Pogba lanzó un pase largo para Kylian Mbappé, quien llegó al fondo para habilitar a Griezmann. El atacante controló el balón en dos tiempos antes de pasar a Pogba, quien marcó un golazo de zurda para extender la ventaja de su equipo.
El tanto golpeó a Croacia, que se desmoronó y sufrió el cuarto de Francia a los 65 minutos. Lucas Hernandez se lanzó en ataque por la izquierda y le dio el balón a Mbappé, quien frente a la medialuna del área y sin marca sacó un zapatazo inatajable para el arquero rival.
Croacia descontó inesperadamente a los 68 cuando Mandzukic aprovechó un error grosero de Lloris, quien intentó eludirlo tras recibir un pase atrás de Pogba pero permitió que el atacante le tocara el balón para mandarlo a las mallas.
La final del domingo fue la que tuvo más goles desde la victoria de Inglaterra 4-2 sobre Alemania en 1966, y la que tuvo más emociones en 90 minutos desde el 5-2 de Brasil sobre Suecia hace 60 años.
El descuento animó al elenco balcánico, que estuvo cerca de descontar a los 77 con un remate de Rakitic que salió apenas desviado, pero finalmente no pudo volver a marcar para meterse otra vez en partido.
(Reuters)