La Oficina Nacional de Estadísticas de Cuba (ONE) dio a conocer en su informe “Tecnología de la Información y las Comunicaciones (TIC)”, que el país cuenta ya con 1,014,000 computadoras y más de 2.9 millones de usuarios de Internet, aunque las cifras no tengan una relación directa con las opiniones de algunos cubanos.
El número de computadoras registradas en Cuba creció un 61 por ciento respecto a 2008, año en que se liberó la venta de esos equipos. También contribuyó la medida del 2011 de la Aduana de la República de Cuba que autorizó a los viajeros a importar dos computadoras personales a su llegada a la isla.
Para Alejandro Domínguez, un joven de 24 años y técnico operador de computadoras, la medida de la Aduana General no ofrece muchas posibilidades, debido a las irregularidades de sus funcionarios. “Mi tío, que fue de misión (colaborador en el extranjero) nada más pudo traer una computadora, no le permitieron dos. Y he escuchado que a otras personas no les conviene traer dos porque aquí se la cobran al mismo precio (en que la adquirió), y hasta mucho más cara”, apuntó.
Las cifras que apuntan a la conectividad indican que solo 515, 400 computadoras se conectan a Internet. En las mismas incluyen a las instituciones, las escasas cuentas domésticas y las salas de navegación conocidas como Nauta.
“En la casa nadie tiene Internet, el que lo tiene es por ‘fuera’, de contrabando”, aseguró Domínguez.
"Las pocas gentes que tienen internet la usan para comunicarse con los familiares y amigos en el exranjero", agregó.
Cifras en frío
El bloguero Henry Constantín acaba de regresar a su natal Camagüey de un curso de seis meses en Miami y ha visto algo que pudiera alentarlo, pero mueve mucho sus expectativas.
“Veo que en el telepunto de mi ciudad pusieron cuatro máquinas más, y la mayoría del tiempo las máquinas permanecen vacías porque la gente no tiene el dinero aún para entrar. No sé la estadística cuán cierta sea”, señaló.
La medida aduanal de 2011 alentó a familiares y amigos a ponerse como una meta tener una computadora, indica Constantín.
“Una persona que viene de allá (el exterior) casi trae más pensando, más que en la comida, en resolver una computadora o memoria (flash) a un familiar", dijo el joven, autor del blog “Reportes de viaje”.
“Excepto algunos pequeños puntos en La Habana, y otra ciudad donde hay redes wi-fi clandestinas, la mayoría de los cubanos tienen prohibido –por razones políticas y tecnológicas- el acceso a Internet. "Conozco casas en las que hay tres computadoras, pero ninguna con acceso a Internet”, concluyó.
‘Navegar’ es un clamor general
El pedido de una internet libre para los cubanos ha sido impulsado lo mismo por la archiconocida bloguera Yoani Sánchez -a través de su blog Generación Y- que por blogueros y periodistas oficialistas, aunque estos últimos con menos o poca frontalidad con el poder.
La joven documentalista Yaíma Pardo es autora de “Offline”, un corto documental en donde hace desfilar tanto a sus coetáneos como a intelectuales de la oficialidad que se quejan de las trabas para acceder a la información en Cuba.
El crítico de Cine Gustavo Arcos explica en el documental: “Cuando un periodista, un individuo –mujer u hombre- quiere investigar sobre ese fenómeno, empiezan a aparecer las trabas… los ministros y vice-ministros no te conceden entrevistas. Se hace muy difícil contrarrestar la información por estas vías”.
Desde el exterior y en las redes sociales muchos cubanos han impulsado campañas para que el régimen de La Habana permita un acceso libre a la Internet. Conecta Cuba reúne medios y esfuerzos para este fin.
La conexión del cable submarino que unió el puerto de La Guaira, en Venezuela, con el poblado de Mar Verde, en Santiago de Cuba, alentó las esperanzas que muchos ciudadanos pusieron en una conectividad que los funcionarios cubanos prometían superaría en 3 mil veces las posibilidades actuales.