La provincia de Guantánamo, en el extremo más oriental de Cuba, comenzó a sentir la pasada noche las primeras señales de la llegada del poderoso huracán Irma, ahora de de categoría 4, con intensas lluvias y fuertes ráfagas de viento.
Guantánamo es una de tres provincias cubanas que se encuentran en fase de alarma o aviso por el paso del huracán, cuyo vórtice no se espera que toque territorio cubano pero que pasará muy cerca de la costa norte de la isla.
La fase de alarma es la tercera de las cuatro etapas que se declaran en Cuba ante eventos ciclónicos y se activa 24 horas antes de la llegada del fenómeno meteorológico.
Tal y como se esperaba, Punta de Maisí, el enclave más oriental de Cuba, fue el primer lugar donde se percibió la llegada del potente ciclón.
Se trata del mismo lugar por el que entró a la isla el huracán de fuerza 4 Matthew en octubre del año pasado.
En la última reunión del Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil (EMNDC) se dio a conocer que para esta madrugada se esperan marejadas con olas de hasta cinco metros e inundaciones en la localidad de Baracoa, que posteriormente se propagarán a las costas de las provincias de Holguín y Las Tunas.
Según ese organismo el “momento más crítico y de mayor acercamiento de Irma a las costas cubanas” será el sábado, cuando Irma estará a la altura de las provincias de Sancti Spíritus y Villa Clara (costa norte), donde provocará “sobreelevación del nivel del mar”.
Ese día el radio de acción del Irma se acercará “peligrosamente con vientos huracanados” a los cayos ubicados al norte de Ciego de Ávila -donde se concentran varios hoteles y áreas turísticas-, mientras las precipitaciones se concentrarán en la costa norte del centro de Cuba.
El EMNDC también prevé inundaciones ligeras en la parte sur de Camagüey, Ciego de Ávila y Sancti Spíritus, por lo que pidió que se extremen las medidas de precaución en esa zona.
Een el célebre Malecón de La Habana se prevén más adelante olas de hasta cinco metros que persistirán durante varias horas.
Las predicciones no indican que el Irma vaya a golpear directamente a La Habana, aunque las olas y la crecida del mar sí podrían provocar inundaciones en la ciudad, así como lluvias y rachas intensas de viento.
La potente maquinaria de la Defensa Civil de la isla se prepara desde hace dos días para la llegada del huracán a Cuba, donde unas 700.000 personas ya han sido evacuadas de sus hogares, a las que se suman más de 36.000 turistas extranjeros que se encontraban en los cayos Santa María, Coco y Guillermo.
De ellos, el 60 % eran canadienses que han retornado a su país, y el resto han sido reubicados en hoteles de zonas más seguras como Varadero (5.000 turistas), La Habana, el occidente de Cuba o en Trinidad y Cienfuegos, en la zona sur.
(EFE)