El diario estatal Juventud Rebelde anunció que el gobierno cubano permitirá la creación de cooperativas privadas de informáticos, dentro de las 47 actividades en las que se podrá ejercer esa forma de gestión no estatal.
Según el periódico, “en la etapa inicial solo se concibieron tres servicios profesionales (traductor, informático y contabilidad), y se prevé la constitución de 230 cooperativas no agropecuarias, que incluyen sectores como el transporte, la producción de materiales y servicios de la construcción, servicios personales, domésticos y profesionales”.
Pero, Reinier Agüero, quien fue expulsado de la Universidad de Ciencias Informáticas de La Habana en febrero de 2011 por conceder una entrevista al periodista español Joan Antoni Guerrero Vall a través de Facebook, mostró su escepticismo al conocer la noticia.
Agüero manifestó a martinoticias.com desde Camagüey, que él no piensa que esta medida “venga acompañada de una apertura para la internet en la isla”.
‘No creo que sea algo que libere por completo (la internet). Es como un paso, un respiro de los que ya están acostumbrados a dar, de que cuando la cosa está un poco tensa, pues permiten algo, pero siempre estas aperturas van acompañadas de sus trabas”, indicó.
El bloguero y escritor Orlando Luis Pardo afirmó desde La Habana, que “en el momento en que un informático genere una idea creativa y un contacto con determinado proveedor en el extranjero, digamos en Nicaragua o Venezuela, y aparezca la idea de importar unos equipos que emiten una señal Wi-Fi, y aparece otra idea y otra, inmediatamente le van a retirar la licencia, porque va a violar un estatuto de la Resolución 1418 del Ministerio de Comunicaciones”.
Según Orlando Luis, esta medida gubernamental no logrará dinamizar el espectro informático en Cuba.
“No lo creo, porque ahí está Alan Gross (subcontratista estadounidense preso en Cuba) detenido por ningún motivo, por traer al país equipos comerciales de comunicación que en cualquier parte del mundo son públicos, y hay muchos cubanos presos por establecer redes Wi-Fi dentro de la isla para poder tener internet ilegal, de un vecino a otro vecino. O sea, hay muchos precedentes con las antenas parabólicas también, hay personas detenidas y procesadas”.
En su opinión, “el monopolio estatal sigue teniendo miedo de perder su poder y su hegemonía, y simplemente son pequeñas brechas que se están dando; tal vez, poco a poco, el muro se desplome y se logre recuperar la dignidad económica y el protagonismo económico que tenía este pueblo, y que lo fue perdiendo durante años de estatismo y centralismo”.
Según el periódico, “en la etapa inicial solo se concibieron tres servicios profesionales (traductor, informático y contabilidad), y se prevé la constitución de 230 cooperativas no agropecuarias, que incluyen sectores como el transporte, la producción de materiales y servicios de la construcción, servicios personales, domésticos y profesionales”.
Pero, Reinier Agüero, quien fue expulsado de la Universidad de Ciencias Informáticas de La Habana en febrero de 2011 por conceder una entrevista al periodista español Joan Antoni Guerrero Vall a través de Facebook, mostró su escepticismo al conocer la noticia.
Agüero manifestó a martinoticias.com desde Camagüey, que él no piensa que esta medida “venga acompañada de una apertura para la internet en la isla”.
‘No creo que sea algo que libere por completo (la internet). Es como un paso, un respiro de los que ya están acostumbrados a dar, de que cuando la cosa está un poco tensa, pues permiten algo, pero siempre estas aperturas van acompañadas de sus trabas”, indicó.
El bloguero y escritor Orlando Luis Pardo afirmó desde La Habana, que “en el momento en que un informático genere una idea creativa y un contacto con determinado proveedor en el extranjero, digamos en Nicaragua o Venezuela, y aparezca la idea de importar unos equipos que emiten una señal Wi-Fi, y aparece otra idea y otra, inmediatamente le van a retirar la licencia, porque va a violar un estatuto de la Resolución 1418 del Ministerio de Comunicaciones”.
Según Orlando Luis, esta medida gubernamental no logrará dinamizar el espectro informático en Cuba.
“No lo creo, porque ahí está Alan Gross (subcontratista estadounidense preso en Cuba) detenido por ningún motivo, por traer al país equipos comerciales de comunicación que en cualquier parte del mundo son públicos, y hay muchos cubanos presos por establecer redes Wi-Fi dentro de la isla para poder tener internet ilegal, de un vecino a otro vecino. O sea, hay muchos precedentes con las antenas parabólicas también, hay personas detenidas y procesadas”.
En su opinión, “el monopolio estatal sigue teniendo miedo de perder su poder y su hegemonía, y simplemente son pequeñas brechas que se están dando; tal vez, poco a poco, el muro se desplome y se logre recuperar la dignidad económica y el protagonismo económico que tenía este pueblo, y que lo fue perdiendo durante años de estatismo y centralismo”.