El Observatorio LGBT de Cuba, un grupo de activistas independientes que defienden los derechos de los homosexuales, bisexuales y transexuales, anunció que llevará a cabo una campaña de recogida de firmas en la isla en favor del matrimonio entre personas del mismo sexo.
Leannes Imbert, directora de este colectivo, explicó a la agencia de prensa española Efe que se pretende recoger al menos 10.000 firmas a favor del matrimonio gay y presentarlas a la Asamblea Nacional del Poder Popular para exigir que discuta esa iniciativa.
"Consideramos que el parlamento cubano aún no ha puesto en su agenda la idea de discutir en serio el matrimonio homosexual", dijo Imbert.
En Cuba, el oficial Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), que dirige Mariela Castro, hija del gobernante Raúl Castro, promueve desde hace años un anteproyecto de ley con modificaciones al Código de Familia para reconocer derechos de las minorías sexuales como la unión legal entre parejas homosexuales, pero la iniciativa aún no se ha debatido.
Precisamente, Mariela Castro es desde este año diputada de la asamblea nacional cubana. Imbert admitió que la entrada de Mariela Castro en el Parlamento alimentó en algunos miembros de la comunidad LGBT la esperanza de resultados hacia el reconocimiento de las uniones homosexuales, pero se mostró escéptica al respecto.
"El discurso de ella (Mariela Castro) indica que se están dando pasos pero lo cierto es que el colectivo LGBT aquí en la isla no conoce nada de eso. Los activistas no oficialistas tenemos la certeza, lamentablemente, de que no se está
hablando en serio" del matrimonio homosexual, señaló Imbert.
Enfatizó que su colectivo defiende el derecho del matrimonio y no acepta otras fórmulas como las uniones de hecho o consensuadas porque supondrá una situación de "desventaja" respecto a los heterosexuales. I
Imbert hizo estas declaraciones en La Habana, donde ella y una decena de activistas no oficialistas realizaron una pequeña marcha con motivo del Día del Orgullo Gay.
Leannes Imbert, directora de este colectivo, explicó a la agencia de prensa española Efe que se pretende recoger al menos 10.000 firmas a favor del matrimonio gay y presentarlas a la Asamblea Nacional del Poder Popular para exigir que discuta esa iniciativa.
"Consideramos que el parlamento cubano aún no ha puesto en su agenda la idea de discutir en serio el matrimonio homosexual", dijo Imbert.
En Cuba, el oficial Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), que dirige Mariela Castro, hija del gobernante Raúl Castro, promueve desde hace años un anteproyecto de ley con modificaciones al Código de Familia para reconocer derechos de las minorías sexuales como la unión legal entre parejas homosexuales, pero la iniciativa aún no se ha debatido.
Precisamente, Mariela Castro es desde este año diputada de la asamblea nacional cubana. Imbert admitió que la entrada de Mariela Castro en el Parlamento alimentó en algunos miembros de la comunidad LGBT la esperanza de resultados hacia el reconocimiento de las uniones homosexuales, pero se mostró escéptica al respecto.
"El discurso de ella (Mariela Castro) indica que se están dando pasos pero lo cierto es que el colectivo LGBT aquí en la isla no conoce nada de eso. Los activistas no oficialistas tenemos la certeza, lamentablemente, de que no se está
hablando en serio" del matrimonio homosexual, señaló Imbert.
Enfatizó que su colectivo defiende el derecho del matrimonio y no acepta otras fórmulas como las uniones de hecho o consensuadas porque supondrá una situación de "desventaja" respecto a los heterosexuales. I
Imbert hizo estas declaraciones en La Habana, donde ella y una decena de activistas no oficialistas realizaron una pequeña marcha con motivo del Día del Orgullo Gay.