WASHINGTON D.C. - La administración Biden-Harris llegó a sus primeros 100 días en el poder y, a excepción de la aprobación del TPS, expertos señalan que no se han producido cambios significativos en la política hacia Venezuela.
Para el analista Gilberto Carrasquero, comentarista político y estratega de varias campañas electorales, la estrategia ha sido sostenida, lo que ha cambiado, es la manera de expresarla.
“Yo no creo que ha habido un cambio profundo en la política. Yo creo que ha habido una política que se ha sostenido. En todo caso el verbo de Trump era más incendiario, el verbo de Trump, que terminó en verbo nada más, pero que como política de gobierno, en ese momento, era una posición muy firme y una cuestión muy rotunda contra Venezuela, contra el dictador Maduro. Pero lo que ha hecho Biden es mucho más discreto, mucho más a su estilo”, dijo.
Sectores más conservadores de la diáspora venezolana, consideran que, a futuro, la administración Biden-Harris podría suavizar la línea dura hacia Miraflores. Así lo considera el analista Franklin Camargo, quien asegura que aún es pronto para tener una idea definitiva.
“Veremos el levantamiento de sanciones y no imposición de nuevas sanciones a testaferros del régimen”, dijo Camarga, quien es activista político y coautor del libro "Después del socialismo, libertad".
Por su parte, la representación diplomática de la oposición en Washington, considera que con la actual Casa Blanca, no sólo se pudo concretar el TPS, promesa de campaña de Biden; sino que el diálogo ha sido fluido en torno a otros temas de interés para la diáspora venezolana.
“Absolutamente hemos mantenido reuniones de rutina, para el TPS como muchos otros temas que trabajamos en conjunto los venezolanos detenidos en Estados Unidos”, asegura a la Voz de América Brian Fincheltub, director de Asuntos Consulares de la Embajada de Venezuela en Washington.
El TPS ha sido celebrado como un gran avance, a juicio de la embajada de Venezuela en Washington, pero aún quedan algunas lagunas como, por ejemplo, qué pasará con los venezolanos que tienen doble nacionalidad. “Muchas personas son venezolanos que han vivido toda su vida en Venezuela, pero que tenían descendencia europea han optado por tener otro pasaporte, otra nacionalidad, pero para usarla más que todo como un documento de viaje debido a la situación”, explica Fincheltub.
Otro punto importante es el humanitario. Para el experto Gilberto Carrasquero habría que darle un manejo diferente a las sanciones para facilitar el ingreso de combustibles a Venezuela. “Yo creo que si pudiéramos tener un manejo de las sanciones más inteligente, yo sí creo que se podría beneficiar el pueblo venezolano sin que necesariamente conlleve a un aire para el gobierno”.
En estos primeros 100 días del gobierno Biden-Harris, es el TPS el tema que se ha destacado en la agenda de Estados Unidos hacia Venezuela. Voceros de la Casa Blanca insisten en no reconocer a Nicolás Maduro como presidente del país y mantener las sanciones a su persona y a los colaboradores de su gobierno.