El senador cubanoamericano por la Florida Marco Rubio y su esposa, Jeanette, cenaron en la noche del miércoles en la Casa Blanca con el presidente Donald Trump y la Primera Dama, en la primera cena privada de Trump con un legislador.
Melania Trump viajó desde Manhattan para asistir al evento programado en el Salón Azul, al final de una jornada en la que el presidente se reunió con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu.
Antes de la cena, Trump y Rubio se reunieron con la esposa del líder opositor venezolano Leopoldo López. En un mensaje en Twitter, el presidente pidió al gobierno de Nicolás Maduro la liberación de López, condenado a 14 años de cárcel.
"Venezuela debería permitir que Leopoldo López, un prisionero político y esposo de Lilian Tintori, salga de la cárcel inmediatamente", afirmó Trump en el mensaje.
El senador Rubio ha manifestado su preocupación por la constante violación de los derechos humanos bajo el gobierno de Maduro, y ha exigido la liberación del líder opositor.
En agosto pasado, Rubio deploró la decisión de una corte de apelaciones en Caracas de ratificar la condena de casi 14 años de cárcel contra López.
El senador republicano declaró entonces en nota de prensa que Venezuela se está derrumbando, y el presidente Nicolás Maduro sigue atropellando la independencia de los tribunales con el fin de mantenerse en el poder.
Afirmó que López merece estar en su hogar como hombre libre y que el pueblo venezolano no quiere tener más a Maduro en el poder.
El acercamiento entre Rubio y Trump
Rubio es partidario del plan de Trump de trasladar la embajada estadounidense en Israel de Tel Aviv a Jerusalén. No se sabe si la visita tiene que ver con conseguir apoyo en el Congreso para la mudanza de la sede diplomática.
Trump se ha reunido con varios legisladores en Washington, pero no había invitado a ninguno a una cena en la Casa Blanca, con las esposas incluidas.
Trump y Rubio dejaron atrás sus escaramuzas verbales de la campaña por la nominación presidencial republicana en 2016, y luego se apoyaron mutuamente en sus respectivas campañas por la presidencia y por reeelegirse como senador por la Florida.
Rubio ganó en noviembre un nuevo período de seis años en el Senado federal.
El legislador cubanoamericano desestimó esta semana los pronósticos de que Trump no terminaría sus cuatro años como presidente, indicando que lo que se necesita es que el país se una y se remangue la camisa.
“Necesitamos ocuparnos del país, ya veremos cómo sale todo”, dijo al programa TMZ. “Está bien discrepar, y podemos tener un debate sobre las cosas en que discrepamos, pero en las que podemos avanzar, debemos intentarlo”.
La cena con los Rubio sigue a la que tuvo Trump la víspera con otro precandidato republicano, el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, y su esposa, Mary Pat, en la mansión presidencial.
[Con información de la Casa Blanca, The Miami Herald, TMZ and The Washington Examiner]
