Mientras Cuando el amor no alcanza, la telenovela en la que trabajó, continúa en la televisión nacional, la joven actriz Patricia Ramírez sigue en estado neurovegetativo en el Centro Internacional de Restauración Neurológica (Ciren) de La Habana. La madre de Patricia espera los capítulos siguientes para recodarla como era antes del accidente de tránsito que, en abril del 2014, la dejó en un estado de coma del que despertaría meses después.
La semana pasada, el periódico oficial Granma reprodujo un despacho de la Agencia de Información Nacional (AIN) que ofrece detalles del tratamiento médico que recibe la actriz. El reportaje utiliza como título una paráfrasis (Cuando la esperanza alcanza) para hacer notar que no todo está perdido "en manos del Ciren", como escribe la periodista Saylin Hernández Torres en un subtítulo de su investigación.
Hace poco más de un mes, una amiga de la actriz inició una campaña para recaudar fondos que permitan costear el traslado de Patricia hacia Estados Unidos, con el objetivo de que sea tratada por especialistas en busca de una recuperación total.
En Cuba, el doctor Armando Díaz de la Fe, explica con lujo de detalles el tratamiento que recibe Patricia, y que incluye "intervenciones directas con terapistas físicos, defectólogos, logopedas, además de "magnetoterapia, laserterapia y electro-estímulos".
A pesar del esmerado cuidado médico que ha comenzado a recibir la joven, el pronóstico no es optimista. El galeno aclara que "lamentablemente, no existe hoy un medicamento que posibilite el paso del paciente de un estado neurológico a otro. En el mundo no se registra evidencia científica ni hay guías prácticas clínicas específicas que planteen cómo trabajar con este tipo de paciente, pues lo reportado son apenas experiencias de experto con pequeñas muestras de casos (…)".
Martí Noticias habló este lunes con su madre, Nilda González, quien opina que el Ciren es el lugar indicado dentro de la isla, el de más alto nivel, pero no descartó la posibilidad de que se abran otros campos para tratar a su hija. González no descartó un viaje a la International Brain Research Foundation, de New Jersey, de recaudarse el dinero necesario, en busca de una cura para Patricia.
En el momento de redactar esta nota, la campaña "Todos por Patricia, Joven Cubana" había recaudado $10.575.
González describió la situación de su hija según se la han dictaminado los médicos: un "estado de mínima conciencia; estado vegetativo por lesión accional difusa, debido al trauma cráneo-encefálico que sufrió por el accidente".
Patricia lleva 17 meses en esta situación. Como consecuencia del accidente sufrió también fractura de pelvis, fractura de clavícula y perdió el bazo. Estuvo 58 días en terapia intensiva.
Otra campaña desde EEUU cumplió su objetivo
En agosto pasado, el periodista independiente Serafín Morán dio a conocer un video en el que se podía ver el extremo nivel de pobreza de una familia de La Habana. Un adolescente, Abraham Bocurt, de 16 años, explicaba cómo su madre sacó adelante a la familia. Bocurt había perdido todas las esperanzas de vivir bajo un techo digno.
El testimonio fue distribuido por el portal digital Cubanet, con sede en Miami. Dos jóvenes del exilio cubano, Enrique Ricabal y Frank Falcón, iniciaron una campaña de recaudación –igual que en el caso de Patricia Ramírez, a través de Gofundme– que logró reunir el dinero necesario para comprar una vivienda digna a la familia de Abraham. El periodista Mario Vallejo dio visibilidad a la campaña "Todos somos Abraham" en los medios hispanos en Estados Unidos y viajó a Cuba a entregar el donativo y gestionar la compra de la vivienda.