El Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza de Puerto Rico dijo el martes en un comunicado que rescató a 26 cubanos, entre ellos una niña de dos años de edad, cuando trataban de entrar ilegalmente al país.
El organismo dijo en un comunicado dijo que se trató de dos hechos separados.
Quince migrantes ilegales, incluida la niña de dos años, habían fueron rescatados el pasado 8 de junio por un helicóptero de esa agencia federal en la Isla de Mona, un islote deshabitado situado entre Puerto Rico y República Dominicana.
El segundo grupo de 11 cubanos, nueve hombres y dos mujeres, arribó al mismo islote el pasado domingo y fue rescatado también por un helicóptero de la Guardia Costera estadounidense.
El Sevicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), con sede en la Base Ramey en Aguadilla, en Puerto Rico, indicó que durante lo que va del año fiscal federal 2016 ha detenido y procesado a 225 inmigrantes cubanos.
Todos llegaron a la isla caribeña con la ayuda de contrabandistas desde la República Dominicana.
"Consistentemente advertimos nuestra preocupación de cómo los contrabandistas de personas dejan migrantes en Mona conociendo el peligro", dijo Ramiro Cerrillo, jefe de la Patrulla Fronteriza en Aguadilla.
Añadió que "parte de nuestra misión es prevenir la pérdida de vidas y reiterarle a los migrantes nuestra advertencia respecto al peligro de atravesar el Pasaje de Mona", que separa República Dominicana de Puerto Rico.
Los detenidos fueron transportados a las instalaciones de CBP en Aguadilla para su debido proceso de inmigración.
Estos hechos se suman a la crisis migratoria cubana en la región, que ha involucrado a países como Ecuador, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Guatemala,Uruguay, Paraguay, Honduras y México.
En Colombia permanecen más de 300 cubanos a la espera de una solución que les permita seguir su travesía rumbo a Estados Unidos.
Miles de cubanos han podido pisar suelo estadounidense a través de puentes aéreos humanitarios pactados por países de la región para aliviar la crisis.
Los cubanos están protegidos por la Ley de Ajuste Cubano de 1966, que ofrece beneficios excepcionales a cubanos que consiguen pisar suelo estadounidense.